EscucharEn lo que a él concierte, el presidente Luis Guillermo Solís salió a defenderse del informe de la Comisión Investigadora de Créditos Bancarios achacándole tres falsedades.
Solís reaccionó unas dos horas después de que los diputados hicieran públicas sus conclusiones, en las que afirmaron que el mandatario faltó al deber de probidad.
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"Si bien hemos apoyado sin objeciones este trabajo del Congreso, de cuyo informe realizaremos un análisis posteriormente, me permito refutar de manera categórica algunas conclusiones del informe que carecen de todo fundamento", dijo Solís en un comunicado.
Falsedad 1 según Solís
"Es absolutamente falso que el presidente de la República o el Consejo de Gobierno haya instruido el nombramiento del gerente general del Banco de Costa Rica, Mario Barrenechea, y no hay ninguna prueba que lo sustente", dijo el presidente.
Los diputados concluyeron que Casa Presidencial y el Consejo de Gobierno instruyeron a la Junta Directiva del BCR para que nombrara a Barrenechea, en vez de hacer un concurso para escoger al gerente, y que el presidente "no actuó en condiciones de igualdad" para todos los habitantes.
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Falsedad 2 según Solís
"Rechazo absolutamente que el empresario Bolaños haya obtenido beneficios de las reuniones que tuvo en Casa Presidencial".
Los legisladores concluyeron que Bolaños sí sacó provecho, para sus negocios, de las siete reuniones que logró tener en Casa Presidencial, una de ellas con el mandatario, a finales del 2015.
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Falsedad 3 según Solís
"Es falso y carece de sustento la afirmación que, desde la Casa Presidencial, se haya presionado a dependencias del Ministerio de Econonomía o del Ministerio de Hacienda para favorecer al empresario Bolaños, o que se haya siquiera sugerido la adopción de acciones contrarias a la ley".
El informe de la Comisión concluye que Zapote sí presionó al Ministerio de Economía para reformar el reglamento que impedía comercializar cemento importado y que el propio presidente presionó al exdirector de Aduanas para permitir el desalmacenaje de un cargamento de 20.000 toneladas de cemento de Bolaños, que no podía ingresar al país. Esta última acción, dice el documento, la hizo mediante el diputado Víctor Morales Zapata y el exministro de Hacienda, Fernando Rodríguez.
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La defensa de Mariano
Además de defenderse a sí mismo, el presidente también salió en defenda del director de la DIS, Mariano Figueres, a quien los diputados pidieron destituir por permitir que Solís se reuniera con Bolaños, a pesar de que la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS) había elaborado un perfil sobre él, en el gobierno anterior, por sus presiones a la expresidenta de la CNE, Vanessa Rosales.
"Es falso que Mariano Figueres haya recibido algún informe acerca del empresario Juan Carlos Bolaños. Si el anterior gobierno elaboró algún informe acerca de esa persona, tal documento nunca fue entregado al señor Figueres ni a ningún otro miembro del actual Gobierno. Es la pasada Administración la que debe dar cuentas de dónde se encuentra dicho informe", declaró Solís.
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A su vez, mencionó el nombramiento de Figueres como comisionado para la reconstrucción tras el huracán Otto, una decisión que el informe cuestiona.
"No solo está apegado (el nombramiento) a la más absoluta legalidad sino que además ha sido altamente efectivo y de beneficio para las comunidades afectadas. A un año de la tragedia, las obras ya terminadas y en proceso de construcción defienden el trabajo de don Mariano", dijo Solís.
