“Venta de Cytotec (pastillas para abortar) en Costa Rica, en San José, Alajuela y Cartago”.
“Vendo potenciador sexual , sale en ¢10.000 la caja con cuatro pastillas, solo se toma media hora antes de...”.
“Buenas. Vendo este medicamento pediátrico; está nuevo y sellado. Tengo factura”.
Así rezan algunas ofertas en línea que hoy pretenden atrapar a costarricenses que tengan una conexión a Internet y una tarjeta de crédito o de débito.
Bajos precios, ventas sin recetas, entrega a domicilio y “curaciones milagrosas” son los señuelos que usan páginas de dudosa procedencia para ofrecer sus productos por la red.
Las “farmacias” virtuales tienen en alerta a las autoridades ticas por el riesgo que significan.
“Sabemos que en el país hay contrabando de fármacos que no han sido fabricados bajo buenas prácticas de manufactura. Es un riesgo grande para la persona que los consume”, aseveró Fernando Llorca, ministro de Salud.
Debido a que es un mercado ilegal, no hay datos sobre cuántas personas se han visto afectadas por el consumo de tales fármacos ni sobre qué tamaño tiene el negocio en Costa Rica.
Sin embargo, Alejandro Madrigal, fiscal adjunto del Colegio de Médicos, sostuvo que el trasiego de medicamentos falsificados en el país “es enorme”.
Riesgo. Las “farmacias” virtuales se han convertido en una amenaza real para la salud de los costarricenses.
En el 2014, en el país se detectaron 69 páginas de Internet y cuentas de redes sociales que se dedicaban a esta actividad.
Además, las autoridades se incautaron de más de 5.920 unidades de fármacos que se intentaron introducir aquí ilegalmente.
Los decomisos se realizaron en las aduanas de Peñas Blancas y del aeropuerto internacional Juan Santamaría, y la aduana postal Central, mediante la revisión con rayos X de paquetes.
“Esto es un negocio ilegal. Muchos de estos medicamentos están vencidos, son falsificados o se hacen en laboratorios insalubres que no están registrados”, aseveró María Lorena Quirós, directora ejecutiva del Colegio de Farmacéuticos.
Según las autoridades, los productos que más se comercializan en la web son pastillas para la disfunción eréctil, psicotrópicos, medicamentos para adelgazar o tratamientos de alto costo que venden a precios cómodos.
Estos sitios no tienen nada que ver con establecimientos farmacéuticos registrados que ofrecen sus productos en línea.
Guillermo Araya, director del Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD), aseguró que la venta de medicamentos en línea es una actividad que desarrollan organizaciones a escala mundial.
“No operan en un solo país. En una ciudad albergan los sitios web, en otra nación se desvían las medicinas y a un tercer país se van los dineros que se recaudan en el negocio.
”Según la Organización Mundial de la Salud, el 50% de los fármacos que se transan por Internet son falsos”, dijo Araya.
Al respecto, el Ministerio de Salud enfatizó en que todos los medicamentos tienen que estar registrados y deben ser adquiridos en una farmacia.
Lucha internacional. El Ministerio de Salud, el Colegio de Farmacéuticos, el Colegio de Médicos , el ICD y la Policía Internacional (Interpol) les siguen la pista a las “farmacias” virtuales.
De hecho, Costa Rica forma parte, desde el 2008, del Operativo Pangea, el cual se desarrolla en 100 países con el fin de desarticular estas organizaciones.
Dicha acción conjunta ataca sorpresivamente los sitios web fraudulentos e identifica a los productores y distribuidores de sustancias farmacéuticas ilegales. Además, desarticula las redes delictivas que los respaldan y efectúa decomisos
Los operativos internacionales han detectado la venta de fármacos vencidos a los que se les cambia la fecha de expiración. Además, han desarticulado laboratorios clandestinos que adulteran productos y les agregan sustancias cuyo consumo puede generar intoxicación o muerte.
Incluso se han identificado personas que se dedican al robo en hospitales de frascos vacíos de tratamientos, los cuales rellenan con cualquier pastilla, se sellan y se venden como originales.
“También se comercializan pastillas placebo que colocan en empaques del fármaco que la persona necesita.
”Además, se venden inyectables que necesitan refrigeración y que a la hora de enviar a domicilio pierden su efecto”, advirtió María Lorena Quirós, del Colegio de Farmacéuticos.
Por todo lo anterior, los especialistas piden a los ticos abstenerse de adquirir productos en sitios dudosos.