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Hace tres años, el 24 de julio, una falla eléctrica paralizó los 14 quirófanos del Hospital México y desencadenó una crisis en la red de servicios más grande de la CCSS.
Cientos de operaciones se dejaron de hacer y otros hospitales tuvieron que intervenir para ayudar al México a salir a flote en una situación que fue calificada de "crisis" por las autoridades de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Para que aquella emergencia no se repita, este año se inició la construcción de cinco nuevos quirófanos en el segundo piso del edificio principal del hospital, ubicado en La Uruca, los cuales tendrán un sistema eléctrico de última generación que no sufrirá recargas en caso de que se introduzcan nuevos equipos con otros voltajes en las salas de cirugía.
En el México se realizan entre 80 y 90 intervenciones diarias para atender la demanda de una red de más de dos millones de habitantes.
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La ingeniera María Fernanda Soto, de la subárea de proyectos del centro médico, adelantó que las salas de cirugía abrirán en enero del 2018.
"Estas (salas) llegan equipadas con la tecnología actual. Las instalaciones eléctricas son nuevas y están inyectando más capacidad", explicó Soto.
Los viejos quirófanos tienen medio siglo y llegaron a un punto en el que la red eléctrica no aguantó la carga.
La construcción de los cinco quirófanos está en un 30% de avance. El costo total de la obra es de $2,5 millones, inversión que, además del sistema eléctrico, cumple con medidas como altura de los techos y flujos para la circulación más expedita y segura de los pacientes.
Esta obra forma parte del proyecto 5:30. Cinco, por los quirófanos, y 30 por las camas de recuperación que trae incluida la obra.
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Desde el 2014, el hospital sacó de funcionamiento cuatro de los 14 quirófanos.
Para dar abasto con la capacidad diaria de atención de cirugías programadas y de emergencias, se ha acudido a programas vespertinos y de fines de semana.
El Hospital México está en fase de diseñar y estimar el costo de una torre quirúrgica, que se levantaría sobre la explanada a un costado de la farmacia.
La futura torre, explicó Soto, tendría quirófanos, consultorios y espacio para parqueo.
Priorización con carácter preventivo
En total, el México maneja una cartera de 40 proyectos de infraestructura y equipamiento.
En la actualidad, ocho de esos 40 planes tienen algún grado de avance para una inversión total de ¢3.000 millones. Se espera que estos primeros finalicen el próximo año.
Uno de los trabajos críticos está concentrado en la casa de máquinas.
Esas instalaciones tienen la misma edad del hospital –casi medio siglo–, pero hasta ahora reciben un reforzamiento estructural en techos y paredes para prevenir que una emergencia –incendio, apagón eléctrico, terremoto– saque de operación equipos industriales que son básicos para el funcionamiento ininterrumpido del hospital.
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Entre esos aparatos están la bomba de agua y las calderas. La inversión en casa de máquinas es de ¢305 millones.
"Lo que estamos haciendo es preveer que no se cierren los servicios: ir haciendo los trabajos como corresponde, de forma anticipada", reconoció Soto en referencia a experiencias pasadas donde este hospital, como otros centros de la Caja, tuvieron que responder ante imprevistos que ya tenían encima.
Adicionalmente, este centro remodela el área física para los pacientes con trasplante de médula. Los ¢450 millones que se utilizan en estos trabajos provienen de la Dirección de Cáncer de la CCSS.
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Al mismo tiempo, se confeccionan los carteles de licitación para la mejora de los paneles eléctricos en el área de hospitalización, con la idea de asegurar ese edificio. Aquí se invertirán ¢380 millones.
Además, los dos quirófanos de Oftalmología en el área de Consulta Externa recibirán una inyección de ¢281 millones. Incluirán un área de esterilización, vestidor para personal y pacientes y un consultorio y área de evolución de los operados.
