El Cairo. EFE. El supuesto líder de al-Qaeda en Iraq, el jordano Abu Musab al-Zarqaui, amenazó de muerte al rey Abdalá II de Jordania y advirtió que hoteles, centros turísticos y embajadas en ese país serán objeto de más atentados.
En un mensaje de audio atribuido a Zarqaui aparecido ayer en una página web islamista, cuya veracidad no ha podido ser comprobada, el terrorista jordano se dirigió a sus compatriotas.
Les pidió que "se mantengan alejados de las bases estadounidenses, los hoteles, lugares turísticos y embajadas de los que apoyaron la invasión de Iraq", ya que serán objetivo de los ataques.
"Tu estrella está declinando. No escaparás de tu destino, descendiente de traidores. Seremos capaces de encontrar tu cabeza y cortártela", amenazó Zarqaui al monarca jordano.
Zarqaui puso condiciones para detener los ataques en Jordania, entre ellas la salida de los militares norteamericanos y británicos de territorio jordano y el cierre de las "cárceles secretas" y de las embajadas de Estados Unidos e Israel en Ammán.
El terrorista jordano dijo a sus compatriotas que hace la advertencia porque la gente de al Qaeda "os quiere más que a sí misma".
Además, Zarqaui dijo que los atentados suicidas perpetrados la semana pasada en tres hoteles de Ammán (en los que murieron 57 personas y más de un centenar resultaron heridas) no tenían como objetivo una boda musulmana, que se celebraba en uno de los tres establecimientos atacados.
Según la grabación, el suicida que atacó el hotel Radisson Sas lo hizo en la recepción del hotel, pero la explosión causó que "una parte del techo cayera sobre el lugar de celebración de la boda".
Zarqaui justificó el triple atentado porque "al-Qaeda tenía información de que eran las sedes de los servicios secretos de Estados Unidos, Israel y Jordania".
"Elegimos esos hoteles después de más de dos meses de comprobar, con fuentes fiables, del interior y el exterior, que eran centros de los aparatos de seguridad judíos, estadounidenses y jordanos", afirmó Zarqaui.