Fráncfort, Londres y Nueva York. dpa. La alerta terrorista lanzada ayer en Londres causó pérdidas en las acciones de las grandes compañías aéreas.
Los papeles de las aerolíneas estadounidenses, golpeadas por los atentados del 11 de setiembre del 2001, sufrieron una nueva presión por las nuevas amenazas.
Las bolsas europeas de Fráncfort, Londres y París cerraron con pérdidas, mientras que Wall Street reaccionó con serenidad.
British Airways y la alemana Lufthansa registraron los mayores retrocesos, si bien también se vieron afectadas algunas empresas de turismo y hoteles.
Pero no hubo pánico. Los inversionistas vieron con alivio la anunciada exitosa desarticulación de los planes terroristas en Gran Bretaña contra aviones de pasajeros.
Las pérdidas en British Airways superaron por momentos el 6% y Air Berlin y Air France-KLM también registraron descensos.
Sin embargo, analistas manifestaron preocupación de que las reservaciones de viajes y transportes de carga sufran cancelaciones, con consecuencias en el turismo.
En Wall Street los papeles de las aerolíneas estadounidenses que realizan vuelos internacionales bajaron entre 4 y 5%.
Las acciones de AMR, la casa central de la aerolínea más grande del mundo American Airlines, retrocedieron en el inicio de las operaciones en Wall Street un 4,28 % hasta los $19,42 .
Los títulos de UAL, la matriz de la segunda aerolínea de Estados Unidos, United Airlines, perdieron 5,45 % y se colocaron en $ 22,53.
Para algunas aerolíneas la situación estaba mejorando este año, entre otras cosas por el aumento del número de pasajeros y mayores precios de los billetes.
Según Bank of America, la alarma terrorista no tendrá consecuencias económicas permanentes. Lo único que probablemente se incremente son los costos para medidas de seguridad.