"Estamos dispuestos a tomar medidas difíciles, tales como la congelación de plazas y vacantes, y reducción de consultores, para que la economía pueda soportar un aumento salarial" al sector salud, anunció el mandatario nicaragüense.
Más de 21.000 trabajadores, entre médicos, enfermeras y trabajadores del sistema público de salud paralizaron el pasado 30 de enero sus labores en los centros y hospitales estatales, en demanda de un aumento salarial del 48%.
"Como presidente de la República, suplico a todos los médicos, enfermeras, personal administrativo y trabajadores de la Salud en general, que valoren el esfuerzo del pueblo al destinar parte de su producción y trabajo a este nuevo aumento salarial para ustedes".
La Federación de Trabajadores de la Salud (Fetsalud) que dirige el paro, aceptó discutir la oferta del Gobierno, tras la marcha prevista para ayer a la Casa Presidencial.