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México D. F. AFP. Felipe Calderón espera con serenidad su “turno” para ocupar la presidencia de México, a pesar del eventual “gobierno de resistencia” que planea crear el candidato de izquierda, Andrés Manuel López Obrador.
La calma con la que Calderón ha tomado las advertencias de López Obrador obedece al fallo del lunes del Tribunal Electoral (Trife), que ratificó su ventaja en la presidencial del 2 de julio y en la mayoría sin precendentes que ha obtenido su partido, el oficialista Acción Nacional (PAN) en el Congreso.
“Todavía no soy presidente electo, pero espero; espero mi turno”, comentó Calderón, de 44 años, después de que el Trife confirmó su ventaja en la elección por una diferencia de 0,57% de los votos sobre López Obrador.
El Trife, que aún debe declarar al presidente electo, anuló el lunes un total de 237.736 sufragios dudosos. Con esas deducciones, Calderón mantiene sobre López Obrador una ventaja de 239.751 sufragios.
Aunque el Trife tiene que resolver todavía otras demandas formuladas por López Obrador sobre el período de campaña en el que, según el político de izquierda, el presidente Vicente Fox violó el principio de imparcialidad y empresas privadas apoyaron con publicidad a Calderón, entre otras cosas, el triunfo del candidato del PAN parece irreversible.
Calderón abandonó hace tiempo su casa de campaña, creó ya su equipo de transición y ha mantenido reuniones con líderes de varios sectores, incluidos gobernadores de algunos de los 17 estados que controla el Partido Revolucionario Institucional (PRI), en el poder desde 1929 al 2000 y ahora tercera fuerza en el Congreso.
En la Cámara de Diputados y en el Senado, el PAN necesitará el apoyo de 45 diputados y 13 senadores de otras filas para sacar adelante sus iniciativas, ya que pese a ser la primera fuerza, no cuenta con la mayoría absoluta.
Parece tener asegurados los votos de nueve diputados y del senador del Partido Alianza Nacional, pero buscará el apoyo de legisladores del PRI, que salió dividido de las elecciones tras perder la mayoría en las dos Cámaras.
“Hay que unir esfuerzos con miembros de otras fuerzas políticas”, ha dicho Calderón, que ya comenzó a visitar diversos estados del país.
