Marigot, San Martín.
Entre proteger y evacuar, las islas caribeñas de San Martín y San Bartolomé, ya devastadas por el paso de Irma, se preparaban el sábado en una carrera contrarreloj ante la llegada del huracán José, que interrumpirá las labores de rescate.
Se espera que José, cuya intensidad aumentó a nivel 4, pase el sábado por la noche a 100 km al norte de San Martín, ya destruida al 95% por Irma, que el sábado llegó a Cuba, antes de alcanzar Florida el domingo.
En San Martín y San Bartolomé, donde se decretó la alerta roja por ciclón, el paso de José comportará "olas potentes, cuyos puntos más bajos alcanzarán entre 6 y 8 metros, fuertes lluvias tormentosas y ráfagas de viento de hasta 130 o 150 km/h", según la agencia meteorológica francesa Météo France.
El paso de dos huracanes "tan potentes" al mismo tiempo por el Atlántico no tiene "precedentes conocidos", declaró el meteorólogo de Météo France Frédéric Nathan.
José amenaza con paralizar el sábado las comunicaciones aéreas, mientras que las marítimas ya están suspendidas. Un rompecabezas para los equipos de rescate, que tratan de retirar agua y de acercar a los habitantes de esas islas víveres y materiales.
La isla franco-holandesa de San Martín, de 70.000 habitantes, está repleta de residuos, trozos de chapa, chatarra y vegetales, narró un periodista sobre el terreno. Unos escombros que podrían transformarse en "proyectiles capaces de herir o matar" al paso de José, declaró al diario NRC el comandante de la marina holandesa, Peter Jan de Vin.
Es "ilusorio" creer que San Martín pueda estar correctamente preparado para la llegada de José, afirmó.
LEA: Irma se debilita al tocar tierra en Cuba y sigue su rumbo hacia Florida
En el pequeño aeropuerto de Grand-Case, solo los habitantes más vulnerables -mujeres embarazadas, niños, personas mayores- estaban siendo evacuados, hacia la vecina Guadalupe.
Según dijo el sábado la prefectura de Guadalupe, "todas las líneas aéreas privadas están cortadas" pero habrá "una rotación de dos aviones, quizá tres" para llevar a cabo "evacuaciones sanitarias".
En San Martín, se abrirán nueve refugios con capacidad para "1.600" personas durante el paso de José, prometió el sábado la ministra francesa de Ultramar, Annick Girardin.
Pero la gente no tiene suficiente información y algunos, reunidos en el aeropuerto de Grand-Case, preguntaban a socorristas y gendarmes dónde se encontraban los refugios, señaló un en el lugar.
Militares franceses y holandeses patrullaban por las calles, aunque varios testigos informaron que varias tiendas habían sido desvalijadas. En la parte francesa, 11 personas fueron arrestadas por saqueos, según los gendarmes.
"El ambiente es siniestro. La gente circula armada", dijo el comandante Jan de Vin.
Según el ministerio francés de Interior, se enviaron más de 1.100 personas de refuerzo para las dos islas, incluyendo 300 bomberos, 384 gendarmes, una treintena de miembros del personal médico y decenas de ingenieros.
Las autoridades prevén esperar a que pase José para distribuir agua y alimentos. La aseguradora pública francesa afirmó el sábado que los daños provocados por Irma en las dos islas ascenderían a 1.200 millones de euros (1.450 millones de dólares). Irma dejó al menos 10 muertos y siete desaparecidos en San Bartolomé y en las parte francesa de San Martín.
En total, el huracán causó 25 muertos a su paso por el Caribe, si se agregan los seis muertos en las islas vírgenes británicas, cuatro de las islas Virgenes estadounidenses, dos de la parte holandesa de San Martín, dos de Puerto Rico y uno de Barbuda.