Momentos antes de la movilización se conoció una amenaza de muerte recibida por Carlos Rosanzky, el presidente del Tribunal que juzgó y condenó a reclusión perpetua al exjefe policial Miguel Etchecolatz por crímenes de lesa humanidad en la última dictadura, reveló el magistrado.
La intimidación, que fue recibida en el despacho del juez a través de una carta, incrementó la tensión e inquietud por la desaparición hace nueve días de Julio López, un albañil de 77 años cuyo testimonio resultó clave para la condena de Etchecolatz y que podría haber sido víctima de un secuestro.
La desaparición del testigo puso en alerta a organismos de derechos humanos, que exigen al gobierno la “aparición con vida ya” del hombre, retomando una consigna de su lucha contra la dictadura.
El presidente Néstor Kirchner había asegurado que se está buscando “casi con desesperación” a López, y exhortó a los argentinos a no tener miedo, al ratificar su compromiso de “la búsqueda de la verdad” sobre las violaciones a los derechos humanos en la dictadura.
Unas 30.000 personas fueron desaparecidas durante la última dictadura.