Reuters. Panamá. Panamá retiró del mercado un medicamento usado por miles de personas en el país para combatir la alta presión arterial, tras una investigación que lo relacionó con una misteriosa enfermedad que ha matado a 19 personas.
El ministro de Salud, Camilo Alleyne, dijo la noche del viernes que las autoridades estaban retirando el Lisinopril de las farmacias, hospitales y clínicas privadas del país, mientras examinaban el fármaco en busca de agentes tóxicos que pudieron haber envenenado a 30 personas, principalmente mayores de edad.
Las autoridades de Salud dijeron ayer que la empresa española que fabrica las tabletas se comprometió a ayudar con la investigación, que hasta ahora no ha demostrado que el medicamento sea culpable por las muertes.
Lisinopril, usado para tratar hipertensión y la insuficiencia cardíaca, es un medicamento genérico producido por varias compañías.
Las tabletas vendidas en Panamá son hechas por la empresa española Normon S. A., un laboratorio especializado en medicamentos genéricos, dijeron funcionarios.
“Los fabricantes se comunicaron y están dispuestos a colaborar con las investigaciones”, dijo Rosario Turner, directora de los Servicios y Prestaciones Médicas.
De momento, no se ha podido contactar a algún representante de Normon, con sede en Madrid, para comentar al respecto. La empresa vende sus productos básicamente en África, Asia, Centroamérica, Europa y Sudamérica.
El deceso de una persona el viernes aumentó a 19 el número de muertos en Panamá por la misteriosa enfermedad que comienza con náuseas, fiebre, diarrea y debilidad, y pronto deriva en problemas renales agudos, parálisis parcial y en algunos casos puede terminar en la muerte de la persona.
Detectada por primera vez un mes atrás, la enfermedad ha afectado principalmente a personas mayores de 60 años sometidas a tratamientos por alta presión, diabetes y desórdenes renales.
La mayoría de las víctimas recibía varios tratamientos, pero según autoridades la mayoría tenía al Lisinopril en común, sugiriendo que habría un lote contaminado.
“La causa aún no está completamente confirmada”, dijo Alleyne en una conferencia de prensa. “Decidimos como medida precautoria retirar del uso este medicamento”.
Las autopsias revelaron daños al riñón y tejido nervioso, lo que apunta a la posible presencia de agentes tóxicos.
Unos 7.000 panameños tienen prescrito el Lisinopril por el sistema de salud público. Alleyne no pudo dar una cifra sobre los pacientes privados que son tratados con ese medicamento.
Científicos panameños y estadounidenses descartaron que sea dengue o virus del Nilo.