"No hay garantías para que sesione el parlamento porque varios diputados y senadores no pudieron llegar a La Paz por el bloqueo de carreteras y pocos vuelos debido al paro en El Alto", informó el presidente de la Cámara de Diputados, Mario Cossío.
Sin embargo, el ministro de Gobierno, Saúl Lara, reiteró que el gobierno del presidente Carlos Mesa otorgará garantías para que se reúnan los congresistas.
"No vamos a reprimir a nadie", afirmó, pese a los destrozos de la propiedad pública y privada que hicieron ayer los manifestantes.
Los 157 parlamentarios, que representan a nueve departamentos del país andino de 8,3 millones de habitantes, deberán pronunciarse sobre los reclamos de autonomía regional y los llamados a una Asamblea Constituyente, temas que han dividido al occidente y oriente de Bolivia.
El presidente del influyente Comité pro Santa Cruz, el médico Germán Antelo, visitó ayer la sede del Congreso para dialogar con parlamentarios sobre la convocatoria a un referendo de autonomías el 12 de agosto, mismo día que se realizarán las primeras elecciones de prefectos (gobernadores) en Bolivia.
"Estamos convencidos de lo que estamos haciendo. No toleraremos que no haya referendo porque nunca es ilegal consultarle a la gente, porque eso es democracia participativa", dijo el dirigente de Santa Cruz, región más rica del país.
Sin embargo, regiones más pobres, como El Alto, la ciudad vecina de La Paz, piden que primero se convoque a una Asamblea Constituyente que permitirá la refundación de Bolivia, esta vez con participación de grupos indígenas que no fueron tomados en cuenta en 1825, cuando se fundó Bolivia.