La evidencia forense extraída de los cadáveres demostró que las víctimas presentaban heridas de bala, a pesar de las aseveraciones iniciales de los soldados de que los civiles murieron por la explosión de una bomba colocada en un camino, que también causó la muerte de un soldado, señaló un funcionario.
"Los forenses mostraron una historia diferente a la que contaron los soldados", dijo el funcionario de defensa, quien pidió reservar su identidad.
Este agregó que los cuerpos presentaban heridas que no pudieron haber sido causadas por un artefacto explosivo.
El presidente estadounidense, George W. Bush, dijo ayer que habrá un castigo para los involucrados si la investigación muestra evidencia de un accionar equivocado de los marines en la muerte de civiles en la ciudad iraquí de Haditha.
Castigo. "Estoy consternado por las primeras noticias", dijo Bush. "Estoy consciente de que hay una investigación minuciosa en curso. Si de hecho se quebrantaron las leyes, habrá castigos".
Residentes de Haditha, 200 kilómetros al noroeste de Bagdad en una zona donde hay una alta actividad de insurgentes árabes sunitas, indicaron soldados estadounidenses, atacaron casas y dispararon a personas después de que su patrulla fue destruida por una bomba colocada al costado de una carretera.
Este podría ser el peor caso conocido de abuso de parte de soldados estadounidenses desde la invasión del 2003 y sale a la luz en momentos en que ha caído el apoyo popular a la guerra en Iraq.
Existen dos investigaciones en curso sobre el tema, una indagación criminal que podría llevar a la presentación de cargos por asesinato contra los soldados.