La tragedia en el cerro Musún (norte de Nicaragua) pudo haberse evitado si se hubiesen escuchado las advertencias que diferentes sectores hicieron hace dos años, informó ayer el diario La Prensa.
El matutino indicó que el Ministerio del Ambiente y Recursos Naturales, la Alcaldía de Río Blanco (donde está el cerro) y la Asociaci´´on Amigos del Bosque alertaron al Sistema Nacional para la Prevención sobre los peligros que corrían las decenas de familias instaladas al pie del Musún.
Esto por cuanto se talaron hectáreas de árboles del cerro que, a su vez, servían para amarrar el suelo y evitar deslaves, como el ocurrido a inicios del mes que dejó un saldo de 30 muertos, 300 familias damnificadas y 2.500 personas afectadas, indicó Jaime Incer Barquero de Amigos del Bosque.
Se estima que un 25 por ciento de las laderas del Musún se desplomaron y otro 25 por ciento del terreno quedó en condiciones de alto riesgo.
El representante de Sistema Nacional para la Prevención responsabilizó a “todos” de los desastres.
“Yo no quisiera empezar a buscar culpables, yo quisiera atribuirlo a la misma falta de educación que tenemos en nuestro pueblo, o sea todos somos culpables porque las generaciones ya maduras no nos preocupamos en el momento por llevar suficiente educación al pueblo y el pueblo a su vez no se ha preocupado por educarse”, indicó Cristobal Sequeira a La Prensa.
“Es una Reserva Natural, jamás debieron ir a asentarse ahí. Deforestaron un área que es de reserva, o sea se comieron la reserva que es de todos los nicaragüenses, obviamente eso fue indebido pero ya se hizo, eso es un problema cultural”, añadió.
El funcionario indicó que el Sistema trabaja en el mapeo de las zonas más vulnerables en todo el país.