“Creo que cada país, a medida de su evolución, debe reconocer sus errores del pasado, y creo que Turquía debería plantearse esa meta y reconocer sus errores históricos”, dijo Chirac en el curso de la visita de Estado que realiza a Armenia.
El presidente de Armenia, Robert Kocharián, lamentó que Ankara se resista a reconocer el genocidio, que se saldó con la muerte de un millón y medio de armenios, por el que los dos países siguen de hecho sin mantener relaciones de Estado.
Kocharián aseguró que Armenia no teme el ansiado ingreso de Turquía en la Unión Europea (UE), y pidió que el país vecino “haga suyo e incorpore a su política el sistema de valores vigente en Europa en lo referente a la libertad de desplazamiento y apertura de las fronteras”.