Seúl y Naciones Unidas
Corea del Norte lanzó el domingo un misil de medio alcance, informaron las autoridades estadounidenses y surcoreanas, en lo que constituyó la prueba balística más reciente realizada por un país que ha estado acelerando el desarrollo de armas y misiles nucleares.
El cohete fue disparado desde una zona en torno a Puckhang, en la provincia sureña de Phyongan, y voló hacia el este unos 500 kilómetros, precisó el Estado Mayor surcoreano. El Comando de Estados Unidos en el Pacífico dijo que rastreó el proyectil antes de que cayera al mar.
Horas después de conocerse el disparo de ese nuevo proyectil, se informó de que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reunirá de emergencia el martes para discutir el asunto.
La cita se convocó a solicitud de Estados Unidos, Japón y Corea del Sur, según la misión de Uruguay, que ostenta la presidencia de turno del organismo durante mayo.
Un funcionario del Estado Mayor de Corea del Sur añadió que el misil parecía ser similar al de rango medio que Corea del Norte disparó en febrero. El proyectil lanzado el domingo alcanzó una altitud máxima de 560 kilómetros, agregó el funcionario, quien habló bajo condición de no ser identificado, de acuerdo con las normas de su oficina.
En una entrevista con el programa dominical de televisión Fox News Sunday, el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, dijo que era demasiado pronto para saber si las presiones diplomáticas y económicas que Occidente está ejerciendo sobre el gobierno de Corea del Norte están teniendo efecto, luego de la última prueba de misiles.
"Estamos en las primeras etapas de la aplicación de la presión económica, así como de la presión diplomática al régimen en Corea del Norte", afirmó Tillerson. "Esperemos que reciban el mensaje de que seguir su programa de armas nucleares no es un camino hacia la seguridad ni a la prosperidad. Las pruebas en curso son decepcionantes e inquietantes. Pedimos que cesen porque en vista de que no han terminado con esas pruebas, no han cambiado su punto de vista".
El presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, presidió una reunión del Consejo de Seguridad Nacional en la Casa Azul, sede oficial de la Presidencia, sobre el lanzamiento, según su oficina. El lanzamiento se produjo una semana después de que Corea del Norte probó con éxito un nuevo cohete de medio alcance que, según Pionyang, podría llevar una cabeza nuclear pesada.
Programa de armamento. Los expertos informaron que ese cohete voló más alto y durante más tiempo que cualquier otro probado por Corea del Norte, y que en un futuro podría alcanzar lugares tan distantes como Alaska o Hawái.
Corea del Norte hizo dos pruebas nucleares el año pasado, lo que podría haber mejorado sus conocimientos para fabricar armas nucleares lo bastante pequeñas como para transportarlas en misiles de largo alcance.
El país también ha probado varios cohetes y sigue aumentando su arsenal de armas balísticas, que también incluyen misiles de medio alcance con combustible sólido que podrían salir de lanzacohetes portátiles en tierra o desde submarinos.
Estos ensayos suponen un difícil desafío para el nuevo presidente de Corea del Sur, un progresista que asumió el cargo el 10 de mayo y que ha expresado su deseo de un acercamiento con Corea del Norte.
La agresiva campaña de Pionyang por avanzar en su programa de armas también la convierte en una de las principales preocupaciones de política exterior para el gobierno de Trump. Sin embargo, Washington no ha logrado establecer una política al respecto.