Seúl. AFP. Corea del Norte afirmó el sábado haber probado con éxito un motor de misil intercontinental (ICBM) que, según afirmó, le garantizaría la capacidad de lanzar ataques nucleares contra Estados Unidos.
Gracias a este nuevo motor, Corea del Norte puede “dotar sus cohetes balísticos intercontinentales de un nuevo tipo de misil”, capaz de transportar “cabezas nucleares más poderosas” y alcanzar el “territorio continental de Estados Unidos”, dijo el jefe de Estado, Kim Jong-un, citado por la agencia oficial KCNA.
La agencia subrayó que Kim había ordenado y supervisado personalmente la prueba.
Este “gran éxito” le “garantiza” a Corea del Norte “lanzar un ataque nuclear contra los imperialistas estadounidenses y otras fuerzas hostiles”, afirmó el líder, según la KCNA.
“Instamos a Corea del Norte a evitar acciones y retórica que desestabilicen aún más la región y, en cambio, se enfoque en dar pasos concretos para cumplir con sus compromisos y obligaciones internacionales”, reaccionó Mark Toner, vocero del Departamento de Estado.
El principal diario norcoreano , el Rodong Sinmun , publicó este sábado en sus dos primeras páginas fotos de Kim supervisando el ensayo del motor, e indicó que la prueba tuvo lugar en el centro espacial de Sohae.
Una de las imágenes muestra al dirigente mirando hacia abajo desde una torre de observación, mientras se ven llamas en el horizonte. En otra, se ve cómo las llamas se expanden hacia abajo desde un motor instalado verticalmente.
Alarde de poder. Este es el último de una serie de anuncios en tono espectacular del gobierno de Pionyang –algunos de ellos verificados desde el extranjero– en relación con sus programas nucleares y de misiles.
Otros han sido vistos con escepticismo por analistas extranjeros de inteligencia y expertos en temas aeroespaciales, quienes creen que el Gobierno intenta dar golpes de efecto previos al congreso del partido único, previsto para mayo.
Corea del Norte ha reivindicado haber miniaturizado cabezas nucleares y desarrollado la tecnología para el ingreso controlado en la atmósfera de las ojivas.
La tensión no ha dejado de aumentar en la península coreana desde el cuarto ensayo nuclear que llevó a cabo Corea del Norte en enero, seguido en febrero por el lanzamiento de un cohete que ,para expertos extranjeros, se trató en realidad de una prueba de misil de largo alcance.
En represalia, el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) adoptó en marzo nuevas y muy duras sanciones contra el régimen de Pionyang, las cuales incluyen restricciones al comercio marítimo y a las exportaciones de minerales, así como la prohibición de obtener carburante para aviones y cohetes.
En este contexto, se va a celebrar el congreso del Partido de los Trabajadores, en el poder, previsto el 7 de mayo.
Se trata del primero del partido en 36 años, y es percibido como una vitrina para el poder para exhibir logros y cimentar la unidad nacional en torno a Kim.
“Kim muestra sus éxitos en el ámbito militar para consolidar la lealtad antes del congreso, y ello pese a que las dificultades económicas son crecientes tras las sanciones de la ONU”, dijo el profesor Yang Moo-jin, de la Universidad de Estudios Norcoreanos.
Según algunos expertos, Pionyang podría lleva a cabo un quinto ensayo nuclear antes del congreso.
Corea del Norte afirmó en enero haber superado con éxito su primer ensayo de bomba de hidrógeno , mucho más potente que la bomba atómica ordinaria, pero el anuncio fue acogido con escepticismo por los expertos internacionales.