Niza, Berlín
"Salvé mi vida debajo de un carro"
Miguel Ángel es un peruano que vive en Niza desde hace cinco años y anoche salvó su vida tras refugiarse debajo de un automóvil cuando el terrorista que perpetró el atentado enfiló por el paseo de los Ingleses atestado de gente.
"Estaba a unos veinte metros, vi que el camión venía hacia mí y la gente corría despavorida por todos los lados", narra este joven que trabaja en el sector del bricolaje.
Asegura que temió por su vida.
Primero se refugió detrás de un poste, hasta que el camión se detuvo y el terrorista comenzó a disparar. "Fue un momento terrible, son imágenes que nunca se van a borrar de mi mente", asegura el joven.
Por instinto, se refugió debajo de un vehículo desde donde vio llegar a patrullas de la Policía que comenzaron a disparar al camión.
"Me metí debajo un carro (....) Pero no se rendía, les respondía los disparos, se me hizo eterno", afirma.
Cuando los agentes avisaron de que el terrorista estaba muerto, Miguel Ángel salió de su escondite.
"Los que estábamos ilesos comenzamos a ayudar a los heridos. Había cuerpos por todos lados, sangre. Fue un momento muy duro", rememora.
Solo cuando llegaron los servicios de primeros auxilios el joven peruano decidió marcharse. "Había gente por todos los lados, en todos los portales", asegura.
"A una amiga le aplastaron el tobillo y no podía correr"
Los españoles Ana Arroyo y Juan Francisco Pérez llegaron el pasado lunes a Niza para aprender francés. "En una noche he aprendido ya suficiente", bromea él.
Presenciaron los fuegos artificiales del 14 de julio, fiesta nacional francesa, justo en el mismo punto donde después fue abatido el terrorista, pero antes de que éste llegara con el camión ya se habían ido.
"Tuvimos suerte, porque fuimos a buscar a una amiga", asegura Juan Francisco. "De repente vimos una avalancha de gente, yo pensé enseguida que era una bomba, después de todo lo que pasó en París", señala Ana.
Él corrió con otros tres amigos hasta refugiarse en un hotel. "Alquilamos una habitación y pusimos la tele. En ese momento, nos dimos cuenta de lo que pasaba", asegura.Ana lo pasó peor.
"Como soy pequeñita no podía avanzar, así que me metí debajo de un coche con otra amiga, a la que aplastaron el tobillo y no podía correr", dice.
"Escuchamos los disparos. Fue terrible. Había sangre por todos los lados", relata esta vallisoletana, que solo cuando regresó la calma se refugió en casa de unos médicos.
"Ella se marchó a ayudar a un hospital y nos acercó a la residencia en la que dormimos".
"Al principio decían que era una pelea como las que hay todos los días"
Jérôme Le Guennec y Zohra Jail acababan de cenar en un restaurante frente a la playa cuando escucharon voces y gritos. "Al principio decían que era una pelea como las que hay todos los días. Pero pronto nos dimos cuenta de que era algo más serio", narra ella.
Desde donde estaban no pudieron ver el camión, pero escucharon los disparos. "Salimos corriendo y nos refugiamos en un hotel. Fueron muy amables con nosotros. No salimos hasta las 5 de la mañana", recuerda él.
El despertar ha sido duro esta mañana. "Nunca te imaginas que algo así pueda suceder en tu ciudad", dice él, mientras Zohra deposita un ramo de flores en una de las vallas instaladas por la Policía para acordonar el paseo de los Ingleses.
Daniel, un turista danés, había llegado la víspera a Niza. Cenaba en una hamburguesería cercana cuando decidió salir a la calle.
"Vi un camión a toda marcha por el paseo. Me parecía imposible. Corrí por una calle perpendicular. Todo el mundo corría despavorido", cuenta.
Una familia encuentra a su bebé tras el atentado gracias a Facebook
Gracias a Facebook, una familia logró encontrar anoche en Niza a su bebé de ocho meses, perdido en el caos.
Minutos después del ataque, una familiar de los padres del niño -que resultó indemne en la masacre en la que murieron al menos 84 personas- lanzó un mensaje de búsqueda de un bebé "malgache laosiano con carrito azul", junto a una foto suya y un número de teléfono por "si alguien lo vio o recogió".
La solidaridad fue inmediata, el mensaje fue divulgado miles de veces y una hora después de su publicación la familia anunciaba por la misma vía que el niño había sido encontrado sano y salvo.
Tiava Banner, la familiar de la pareja que redactó los dos avisos rodeados de signos de interjección agradeció la ayuda brindada por Facebook y por quienes propalaron la noticia y enviaron mensajes de apoyo.
Banner precisaba en su segunda misiva no ser la madre del niño y prevenía de que la familia no daría entrevistas.
Un motociclista trató de parar el camión de Niza
Un motociclista trató de detener el camión que el jueves se precipitó sobre la muchedumbre en Niza, tratando de abrir la puerta del vehículo, pero se cayó y fue arrollado, contó el periodista alemán Richard Gutjahr, que presenció la escena.
"Estaba en el balcón (de un hotel) que da directamente al paseo de los Ingleses, y vi a la gente celebrando (la fiesta del 14 de julio). Luego, de repente, un camión se dirigió hacia la muchedumbre", contó el periodista a la AFP, contactado por teléfono desde Berlín.
"Conducía muy despacio, y eso era lo sorprendente", añade este periodista independiente.
"Lo siguió un motociclista que iba detrás de él. Intentó adelantarlo e incluso abrir la puerta del conductor del camión", explica Gutjahr, que grabó un video con su smartphone, utilizado por la cadena pública alemana ARD.
"Lo que pasa es que se cayó y pasó bajo las ruedas del camión", explicó.
"También vi a dos policías disparando contra el camión", precisó el testigo. "Entonces, el conductor aceleró, el camión se puso a correr muy rápido y embistió en zigzag contra la muchedumbre. Luego hubo entre 15 y 20 segundos de disparos con varias armas", añadió.
La escena duró en total "60 segundos como máximo, de principio a fin", concluyó el periodista, que luego bajó a la calle, donde vio escenas de pánico y 12 cadáveres tirados en el suelo.