Managua
El empresario chino Wang Jing, dueño del HKND Group, concesionario del Canal interoceánico por Nicaragua, aseguró este martes que esa millonaria obra, prevista a iniciar su construcción en diciembre próximo, será ecológica y amigable con el medio ambiente.
"Les doy mi palabra de que el canal de Nicaragua será un canal ecológico, amigable al medio ambiente", dijo el empresario chino, a través de un interprete, durante un encuentro en Managua con el presidente nicaragüense, Daniel Ortega.
Jing hizo esa promesa un día después de que la Comisión del Gran Canal de Nicaragua y la concesionaria china HKND Group presentaran la ruta de la vía interoceánica que se extenderá por 278 kilómetros del litoral Pacífico hasta el Caribe del país centroamericano.
El canal, cuyo ancho será de entre 230 metros y 520 metros, con una profundidad de hasta 30 metros, partirá desde la costa pacífica de Brito, al suroeste de Nicaragua, hasta la desembocadura del río Punta Gorda, en el Caribe, atravesando el Gran Lago en 105 kilómetros, de acuerdo con el plan oficial.
"HKND presta mucha atención desde el principio a la protección del medio ambiente y también a los impactos sociales", sostuvo Wang Jing.
Afirmó que los estudios que tienen hasta ahora sobre esa obra son el resultado de inspecciones, investigaciones y análisis de campo, y también en base de bastantes datos e informaciones reales.
"Ninguno de nuestros resultados viene de nada, de lo vacío. Por todo esto hemos invertido una fortuna considerablemente grande, hasta nos ha costado la vida preciosa de uno de nuestros trabajadores", dijo refiriéndose a un funcionario que falleció en un accidente en el Caribe.
El empresario no precisó el monto de lo invertido.
El empresario chino dijo que han tomado el proyecto del Gran Canal con la responsabilidad de dar "felicidad" a la actual generación de nicaragüenses y a la venidera, y, por eso, su equipo trabaja con una actitud cuidadosa y "de una manera muy discreta".
También agradeció a los diputados opositores que votaron contra la ley de concesión del canal, a los críticos del proyecto, porque eso ha sido "el motor de nuestro avance" y los motiva a trabajar con mayor responsabilidad.
Asimismo, invitó a los críticos del proyecto a trabajar juntos por el progreso de esa obra, cuyos costos el Gobierno nicaragüense ha calculado en al menos $40.000 millones.
Por su lado, el presidente Ortega dijo que la ruta escogida no es la más barata. "Si se hubiera escogido la ruta más barata se habría escogido la ruta más costosa en provocar daños ambientales y costosa para reparar esos daños", afirmó el mandatario.
Ortega sostuvo que para seleccionar una de las cinco rutas consideradas se tomó en cuenta dos aspectos: el ambiental y el social. El mandatario dijo, además, que agotarán los estudios para garantizar la máxima protección ambiental.
Destacó que esa obra dará riquezas a Nicaragua y le permitirá erradicar la pobreza.
Asimismo, indicó que con los recursos que se generen podrán "salvar" la reserva de la biosfera Bosawas, considerada un pulmón de Centroamérica y que sufre un proceso acelerado de deforestación.
Ortega indicó que esa obra ya comenzó a generar empleo y a dar resultados, sin especificar.
El no gubernamental Centro Humboldt expresó este martes su preocupación porque no se haya tratado lo relativo a los impactos en el Lago de Nicaragua, considerando que 105 kilómetros de la ruta pasarán por ahí y que "es uno de los temas de mayor preocupación para los nicaragüenses por tratarse de nuestra mayor reserva de agua potable".