Managua
La Corte Suprema de Justicia (CSJ) de Nicaragua quitó este miércoles al líder opositor Eduardo Montealegre la representación legal del Partido Liberal Constitucionalista (PLI) y se la entregó a un político rival, dejando fraccionada la principal fuerza de oposición de cara a los comicios presidenciales de noviembre.
La representación del PLI quedó en manos de Pedro Reyes Vallejos, uno de los cuatro liberales que reclamaban desde hace seis años la dirección de la agrupación, y a los que Montealegre acusa de ser "títeres colaboracionistas" del gobierno sandinista, encabezado por el presidente Daniel Ortega.
Reyes Vallejos "a partir de esta sentencia ostenta la representación legal del PLI y la presidencia de ese partido", dice la sentencia leída por el presidente magistrado de la Sala Constitucional Francisco Rosales, en conferencia de prensa.
La Corte instó además al Consejo Supremo Electoral (CSE) a adecuar el calendario del proceso electoral de este año, "en atención a los efectos de la presente sentencia, debiendo ordenar al PLI que convoque a la mayor brevedad posible a la convención nacional".
La convención deberá decidir si ratifica una alianza de varios partidos, así como a los candidatos a la presidencia y vicepresidencia propuestos por la agrupación bajo la conducción de Montealegre.
El PLI es la fuerza dominante de la Coalición Nacional por la Democracia, que suma otros ocho partidos y movimientos políticos, y había nominado como candidato presidencial al diputado Luis Callejas y como vicepresidenta a la activista social Violeta Granera, cuya suerte depende ahora de la nueva dirigencia.
Montealegre ostentaba la presidencia del PLI desde el 2013 por mandato de la convención liberal, en sustitución del liberal Indalecio Rodríguez, contra quien cuatro disidentes habían presentado recursos de amparo en los últimos seis años.
La Corte resolvió la disputa del PLI en medio del proceso de elecciones presidenciales y legislativas del 6 de noviembre, en las que el presidente Daniel Ortega buscará su tercer mandato sucesivo.