La Habana y Washington. AFP. Cuba exigirá a Estados Unidos que la saque de la lista de países que promueven el terrorismo como paso previo al restablecimiento de relaciones, dijo ayer un alto funcionario a la prensa local.
“Sería un contrasentido” restablecer relaciones diplomáticas y que la Isla permanezca en esa lista, dijo a la prensa Gustavo Machín, número dos del Departamento de Estados Unidos de la Cancillería local.
Machín forma parte del equipo que negocia el restablecimiento de los vínculos, que el viernes se encontrará con su contraparte en Washington, en la segunda ronda de pláticas, desde que los presidentes Raúl Castro y Barack Obama decidieron restablecer relaciones el 17 de diciembre , tras medio siglo de ruptura y hostilidad.
El funcionario señaló que la apertura de embajadas antes de la cumbre de las Américas en Panamá, el 10 y 11 de abril, como quiere Washington, “dependerá de Estados Unidos”.
Ante tal demanda, una fuente diplomática estadounidense expresó que “sería muy fácil restablecer las relaciones si no se hace una relación entre las dos cosas. Son dos procesos separados”.
En Washington “estamos avanzando tan rápido como podemos en la revisión” de la permanencia de Cuba en esa lista , en la que aparece desde 1982, puntualizó la fuente.
Reiteró: “Tenemos la esperanza de completar el proceso muy pronto, pero no veo que debamos relacionarlo al restablecimiento de las relaciones diplomáticas”.
Al anunciar en diciembre la reaproximación con Cuba , Obama determinó un plazo de 45 días para que el Departamento de Estado revise la permanencia de la Isla en la famosa lista.
Según la fuente diplomática, ese proceso no será inmediato, pero “no demorará meses”.
El establecimiento de relaciones diplomáticas se realiza “bajo consentimiento mutuo”, dijo.
Metas de Cuba. Otra solución que espera La Habana en esas pláticas es la regularización del acceso bancario de su Sección de Intereses en Washington, suspendido desde hace más de un año, y que provoca grandes trastornos para su funcionamiento.
Machín dijo que su delegación marcha a las pláticas con “espíritu constructivo” y celebró que Estados Unidos aceptara su propuesta de incluir en el diálogo el tema de los derechos humanos.
Estados Unidos pide, por su parte, libertad de movimiento para sus diplomáticos en La Habana, libre acceso de los cubanos a su embajada y normalización de las valijas diplomáticas.
Machín indicó que Cuba insistirá en la observancia de los principios del Derecho Internacional y de la Convención de Viena.
La primera ronda fue en La Habana el 22 de enero y la encabezaron la subsecretaria de Estado para el Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson, y la directora de Estados Unidos de la cancillería cubana, Josefina Vidal.