Stockport, Reino Unido. AFP. La reverenda Libby Lane se convirtió ayer en la primera obispa de la Iglesia anglicana de Inglaterra, al ser nombrada para la diócesis de Stockport, en el centro de Inglaterra.
“Es una alegría inesperada estar aquí. Es un día notable para mí y un día histórico para la Iglesia”, dijo Lane, de 48 años.
“Soy muy consciente de todos los que antes, hombres y mujeres, buscaron durante décadas este momento. Pero, por encima de todo, le estoy agradecida a Dios”, añadió.
La ceremonia oficial de investidura será el 26 de enero, informó la Iglesia de Inglaterra en un comunicado.
Antes de pronunciar sus primeras palabras como prelada, Lane pidió un momento de silencio por las 141 víctimas del ataque de los talibanes a una escuela de Peshawar, Pakistán.
Lane, cuyo nombre completo es Elizabeth Jane Holden Lane, fue ordenada sacerdotisa en 1994, una de las primeras en serlo.
Toca el saxofón, es hincha del Manchester United y está casada con otro reverendo, con quien procreó dos hijos.
Su nombramiento se produce un mes después de que el sínodo cambió las reglas para permitir la elección , y el Parlamento británico ratificó el cambio.
La enmienda que abrió la puerta al nombramiento fue bautizada como “Canon 33” y establece que “un hombre o una mujer pueden consagrarse a la función de obispo”.
La aprobación de esta reforma por el sínodo inglés no obliga a las otras iglesias anglicanas a ordenar obispas, aunque algunas ya se habían adelantado.
La Iglesia de Inglaterra nació en 1534, producto de una escisión de la católica cuando Roma le negó el divorcio al rey Enrique VIII y es la madre de la comunidad anglicana, con 80 millones de fieles.
Su líder supremo es desde entonces el monarca británico.
En Inglaterra las mujeres pueden ser curas desde 1992, mas Gales, Estados Unidos, Australia, Canadá y Swazilandia se le adelantaron en ordenar obispas.
El primer ministro David Cameron felicitó a Lane. “Es un nombramiento histórico y un paso adelante de la Iglesia hacia una mayor igualdad en sus posiciones jerárquicas”, afirmó en un comunicado.
“Y el Gobierno está jugando un papel también al promover esta semana leyes que permitirán a las obispas ocupar escaños en la Cámara de los Lores”, la Cámara Alta del Parlamento, cuyos miembros no son elegidos sino designados, fundamentalmente entre la Iglesia (Lores espirituales) y la aristocracia (Lores temporales).