Madrid
El presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, afirmó este domingo que las fuerzas de seguridad "han cumplido con su obligación y con el mandato que tenían de la justicia" para impedir el referendo de independencia catalana, intervención que causó más de 700 personas atendidas por los servicios de salud.
En un discurso televisado desde el palacio de la Moncloa en Madrid, Rajoy se mostró severo y afirmó que "hoy no ha habido un referendo de autodeterminación en Cataluña, al tiempo que recalcó la fortaleza y vigencia del Estado.
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El dirigente conservador arremetió contra la consulta secesionista, para la cual su gobierno presentó un recurso y que fue suspendida por el Tribunal Constitucional. Según él, fue un "ataque premeditado y consciente al que el Estado ha reaccionado con firmeza y con serenidad".
De igual forma, defendió a la policía y la guardia civil, que tenían orden de mantener cerrados los colegios y que este domingo arremetieron contra manifestantes que querían mantener los centros de votación abiertos. En su intervención, los agentes requisaron urnas y demás material electoral.
"Han cumplido con su obligación y con el mandato que tenían de la justicia", dijo.
Después de que figuras de la izquierda pidieran su dimisión por las escenas de las cargas policiales, Rajoy descargó por otro lado toda la responsabilidad en el ejecutivo secesionista catalán de Carles Puigdemont, que convocó el referendo.
"Los responsables de estos hechos, de los que han tenido lugar hoy (...) son única y exclusivamente quienes han promovido la violación de la legalidad y la ruptura de la convivencia, no busquen más culpables, no los hay", declaró.
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Los servicios de emergencia catalanes indicaron que durante la jornada hubo al menos 92 heridos, entre ellos dos graves, uno por un impacto de pelota de goma en un ojo, y otro que sufrió un infarto durante una intervención policial. En total fueron atendidas 761 personas.
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Por otro lado, resultaron heridos al menos 33 agentes policiales, s egún el ministerio del Interior.