Sao Paulo
La mayoría de los colegios electorales brasileños cerró sus puertas hoy, tras unos comicios para los que estaban convocados 142,8 millones de votantes para elegir en segunda vuelta al presidente para los próximos cuatro años y 14 de los 27 gobernadores.
Los brasileños regresaron hoy a las urnas para elegir en segunda vuelta al presidente del país entre la actual mandataria, Dilma Rousseff, y el líder opositor Aécio Neves, así como a 14 de los 27 gobernadores regionales.
Las urnas permanecerán abiertas en las ciudades que tienen husos horarios diferentes a los de las regiones sur y sudeste del país, que concentran a la mayor parte de la población.
El estado de Acre, en el oeste de Brasil y fronterizo con Bolivia, será el último en que se cierren los colegios debido a que tiene tres horas de diferencia con respecto a Brasilia.
Por causa de los diferentes husos horarios los primeros boletines oficiales sobre las elecciones presidenciales, así como las encuestas a pie de urna, sólo se conocerán a partir de las 4:00 p.m. hora de Costa Rica , cuando finalice la votación en Acre.
La jornada electoral, que ha durado once horas, tuvo algunos incidentes aislados, como el asesinato a tiros de un joven de 20 años en el interior de un colegio en del noreste de Brasil.
Las autoridades aclararon que el homicidio no tuvo motivos electorales y que el joven, que no era votante en ese local, fue asesinado cuando ingresó al colegio para huir de un grupo que lo perseguía en una aparente pelea entre bandas rivales.
El crimen tuvo lugar en la escuela de la ciudad de Mossoró, en el estado de Río Grande do Norte, una de las 191 localidades brasileñas donde fue reforzada la seguridad con la presencia de militares por ser consideradas por las autoridades como áreas vulnerables.
También en Río de Janeiro, tercer colegio electoral de Brasil, los soldados vigilaron algunas zonas de la ciudad para prevenir incidentes con bandas de narcotraficantes que operan en las favelas.
Según informó el Tribunal Superior Electoral (TSE) , un total de 542 personas fueron sorprendidas cuando practicaban algún delito electoral y 147 de ellas fueron detenidas en las siete primeras horas de votación.
De los 147 votantes detenidos, 65 fueron sorprendidos cuando realizaban proselitismo dentro de los colegios electorales, 26 cuando distribuían propaganda política, 10 cuando transportaban ilegalmente votantes y 4 por uso de altavoces o amplificadores para hacer campaña.
Esta campaña de las presidenciales ha sido la más polarizada e impredecible de las últimas décadas en Brasil y llegó a su fin sin un candidato aún claramente favorito.
Los sondeos divulgados este sábado por Datafolha e Ibope, los dos institutos demoscópicos más prestigioso del país, mostraron que Rousseff supera entre cuatro y seis puntos porcentuales al líder opositor Aécio Neves, aunque señalaron una caída en la intención de voto de la mandataria y una subida del líder opositor en los días previos a los comicios.
A pesar de mostrar a Rousseff por delante, Datafolha pronosticó un “ empate técnico ” entre ambos candidatos, debido al margen de error de dos puntos porcentuales.
Rousseff, candidata del Partido de los Trabajadores (PT) , ganó la primera vuelta con el 41,5 %, frente al 33,5 % del abanderado del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) .