Bogotá
Un nuevo ataque contra una torre de energía, ocurrido en la noche del miércoles y atribuido a la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), dejó sin electricidad a los más de 400.000 habitantes del departamento de Caquetá, ubicado en el sur de Colombia, informaron este jueves las autoridades.
El general Gabriel Parada, comandante de la Policía Nacional en esa región, informó que en la noche del miércoles se presentó "la caída de la línea del poste 99, que conduce el cableado al departamento de Caquetá".
"Este lamentable hecho es una responsabilidad netamente de las FARC ", que negocian un acuerdo de paz en Cuba con el Gobierno colombiano desde 2012 pero sin que se haya decretado una tregua, dijo Parada a la emisora W Radio.
El gerente de Electrocaquetá, Gerardo Cadena, detalló que aunque el incidente ocurrió cerca a Florencia, capital del departamento, el acceso es "bastante complicado" y deben esperar a que las Fuerzas Militares les garanticen la seguridad para hacer las reparaciones.
"Cualquier problema que haya sobre esa línea (afectada por el ataque) deja sin servicio a todo el departamento de Caquetá", aseguró también Cadena a la emisora Blu Radio.
Según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística, el selvático departamento de Caquetá tiene unos 470.000 habitantes.
De gira por Europa, el presidente Juan Manuel Santos rechazó el ataque, así como otros que han ocurrido en los últimos días y que también han afectado a la ciudadanía y el medio ambiente.
"Lo que sucedió esta mañana en el Caquetá, lo que sucedió en Tumaco, lo que sucedió en Buenaventura, eso tampoco tiene ninguna explicación (...) el gobierno colombiano condena (...) este tipo de actuaciones, de hechos terroristas", dijo Santos en rueda de prensa en Bruselas.
El presidente se refería también a otros ataques atribuidos últimamente a las FARC, como uno en Putumayo (suroeste) en el que supuestos guerrilleros obligaron el lunes a conductores de 19 camiones a derramar unos 200.000 galones de crudo en una zona rural.
Y atentados contra torres eléctricas la semana pasada en el Pacífico colombiano, que dejaron sin luz por varios días al puerto de Buenaventura y al municipio de Tumaco (suroeste).
Mientras que este mismo jueves el Ejército atribuyó a las FARC una explosión que afectó una carretera en el departamento de Cauca, también en el suroeste del país.
Todos estos ataques se produjeron luego de que la guerrilla suspendiera hace poco más de dos semanas el cese al fuego unilateral que mantenía desde diciembre en el marco de los diálogos de paz.
El conflicto armado colombiano ha dejado en más de medio siglo al menos 220.000 muertos y más de seis millones de desplazados.