Llanos del Yarí, Colombia
En medio de aplausos y vítores, la 10°. conferencia de las FARC anunció este viernes su ratificación del acuerdo de paz alcanzado con el Gobierno de Juan Manuel Santos para acabar con más de medio siglo de conflicto armado en Colombia.
"Los guerrilleros y guerrilleras (...) han dado su respaldo unánime al Acuerdo Final de La Habana", anunció Iván Márquez, jefe negociador de las FARC en los diálogos desarrollados por casi cuatro años en Cuba.
En el remoto y caluroso paraje de El Diamante, en el sureste colombiano y donde esta semana los rebeldes analizaron lo pactado, el veterano guerrillero hizo un alto y, con solemnidad, evocó al Nobel colombiano Gabriel García Márquez: "Se acabó la guerra. Díganle a Mauricio Babilonia que ya puede soltar las mariposas amarillas".
"¡Que viva Colombia! ¡Que viva la paz!", concluyó antes de abandonar la sala de prensa instalada en medio de los verdes Llanos del Yarí, seguido por la treintena de dirigentes rebeldes que conforman el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Militantes políticos, entre ellos la exsenadora y activista Piedad Córdoba, líderes vascos cercanos a ETA y defensores de la independencia de Cataluña, se acercaban a saludarlos, y a pedirles autógrafos y 'selfies', en particular a Márquez.
"¡Estoy feliz! Estamos muy contentos de darle una buena noticia a Colombia", dijo a periodistas. "Nos vemos en Cartagena", se despidió, rodeado de sus guardias de seguridad, todos vestidos de civil y con la camiseta con el logo de la conferencia.
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Cartagena será escenario el próximo lunes del pomposo acto con líderes internacionales donde el presidente Santos y el comandante en jefe de las FARC, Timoleón Jiménez, alias Timochenko, firmarán el acuerdo de paz, que para entrar en vigor aún deberá ser ratificado en un plebiscito el 2 de octubre. Las últimas encuestas dan ganador al sí.
La transformación de la guerrilla marxista en un movimiento político legal ha centrado los debates de la cita que desde el sábado 17 reúne a 207 delegados de las FARC llegados de toda Colombia, según la lista definitiva divulgada por la guerrilla.
Además de los comandantes de bloques, la reunión ha congregado a miembros de la delegación de paz, así como a prisioneros e indultados de las FARC.
Se reiteró la "confianza" en la dirección de las FARC, dijo también Márquez, al destacar que ésta "ha conducido con acierto el proceso de reconciliación".
Con miras a la paz, la conferencia decidió empero ampliar los actuales 29 miembros del Estado Mayor a 61 y dispuso la realización "en los próximos meses" de un congreso que tendrá a su cargo las tareas políticas "por venir", informó.
Según fuentes de la guerrilla, ese mitín será "en abril o mayo", una vez concluya la dejación de armas y la reincorporación a la vida civil de los excombatientes prevista en el acuerdo de paz.
"Tanto el Secretariado como el Estado Mayor Central serán los encargados de liderar la transición de las FARC hacia un partido político", señaló el analista Ariel Ávila, de la Fundación Paz y Reconciliación.
Márquez también reiteró a los disidentes del Primer Frente que tienen las "puertas abiertas para acogerlos nuevamente como integrantes de una misma familia".
Meses atrás, cuando se anunció la escisión, la guerrilla había dicho que con su proceder, "esos antiguos mandos y combatientes (...) no solo adoptan un temerario comportamiento contrario a las determinaciones de (la dirección de las FARC ), sino que chocan frontalmente con los anhelos de paz".
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La apuesta a la reconciliación ha marcado estos días a esta organización nacida de una sublevación campesina en 1964.
"Vamos a salir al escenario de la política abierta y el principal reto será lograr una propuesta política que agrupe y aglutine los diversos sectores de la sociedad colombiana", dijo el comandante Carlos Antonio Lozada, integrante del Secretariado.
Según Lozada, para esto será clave el contacto directo con la gente tras cinco décadas en la clandestinidad.
"En la medida en que tengamos posibilidad de acceder al contacto directo con las grandes mayorías del país muchas de las mentiras que se dijeron para desprestigiarnos en medio de la confrontación se irán derribando", apuntó.
El conflicto armado colombiano, en el que también han intervenido otras guerrillas, paramilitares y agentes del Estado, ha causado unos 8 millones de víctimas, incluidos 260.000 muertos.