Caracas. AFP. La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) , que ganó el control parlamentario en Venezuela por primera vez en 16 años años de gobierno chavista, es una heterogénea coalición opositora que nació para enfrentar al presidente Hugo Chávez y ahora asesta una dura derrota a Nicolás Maduro.
Integrada por partidos mayoritariamente de centroderecha y algunos disidentes del chavismo, la MUD obtuvo al menos la mayoría simple de la Asamblea Nacional , con 99 de 167 diputados frente a 46 del oficialismo. Aún quedan por dirimir 22 curules.
La MUD es la hija moderada de la Coordinadora Democrática, que reunió a organizaciones políticas, civiles y gremiales que impulsaron un paro petrolero en diciembre del 2002, cuyo objetivo era poner fin al gobierno que presidía Chávez.
Previamente, en abril de ese año, varios dirigentes de la coalición apoyaron enormes manifestaciones que desembocaron en un golpe de Estado que sacó a Chávez del poder durante 48 horas, hecho que el chavismo le enrostra continuamente.
El experimento de la Coordinadora se disolvió cuando Chávez reafirmó su mandato en el 2004, al ganar un referendo que pretendía revocarlo.
La MUD se formó en torno a la candidatura del dirigente Manuel Rosales en el 2006 –cuando Chávez fue reelegido para un segundo mandato–, y se formalizó en el 2009 para intentar poner fin a su atomización.
Lo hizo con la convicción de que “la manera de enfrentar al Gobierno era a través de la vía democrática, pacífica y electoral”, sostiene la analista política Colette Capriles.
Quiénes son las tres caras visibles de este movimiento y de esta victoria.
Jesús Torrealba. Es el secretario ejecutivo de la MUD. Era el conductor del programa radiofónico y televisivo El radar de los barrios y energizó a la coalición opositora en setiembre del 2014, cuando se sacudía la resaca de las protestas que dejaron 43 muertos, entre febrero y mayo de ese año.
Torrealba, quien se dedicaba a recorrer favelas caraqueñas y a denunciar sus penurias a través del show , se afeitó el bigote –parecido al del presidente Nicolás Maduro– y puso su verbo desenfadado al servicio de la oposición, especialmente cuando inició la campaña a las parlamentarias.
El profesor y periodista de 57 años, al que suelen llamar Chuo Torrealba, fue dirigente del Partido Comunista de Venezuela, del que se divorció por diferencias de concepto, para convertirse en “activista social”, como se define en su Twitter.
Henrique Capriles. Líder del ala moderada de la oposición (centro), el gobernador de Miranda fue uno de los dirigentes más activos en buscar votos para la MUD.
Abogado de 43 años, perdió las presidenciales contra Chávez en el 2012 y frente a Maduro en el 2013. Se desmarcó de las protestas antigubernamentales del radical Leopoldo López en el 2014. Fue diputado a los 25 años y presidente de la Cámara de Diputados –el más joven de la historia– hasta el 2000, cuando se instituyó la actual Asamblea unicameral.
Acusado de asediar la Embajada de Cuba durante el golpe de 2002, estuvo preso cuatro meses.
Lilian Tintori. Es la esposa de Leopoldo López, el líder del sector radical de la MUD condenado en setiembre a casi 14 años de cárcel por incitar a la violencia en las protestas del 2014.
De 37 años, exlocutora de radio, conductora de TV y licenciada en Educación Preescolar, tras el encarcelamiento de López se convirtió en beligerante activista y en uno de los rostros más conocidos de la MUD en el exterior.
Fue muy activa en esta campaña electoral, al acompañar a los candidatos a la Asamblea Nacional, incluso en el acto de campaña en que un dirigente regional opositor fue muerto a tiros.