Buenos Aires
La presidenta argentina, Cristina Fernández, denunció hoy que el Reino Unido ha montado en las Malvinas una base militar nuclear de la OTAN con poder de fuego suficiente para llegar con misiles a parte de Suramérica y pidió a Londres que dejé de "guerrear" y negocie la soberanía de las islas.
"El Reino Unido toma los recursos naturales de las islas no como la cosa más importante. Los recursos sirven apenas para sostener a la población. La verdad sobre Malvinas es que constituye la base militar nuclear de la OTAN en el Atlántico sur. Esta es la verdad que no pueden seguir ocultando", aseveró Fernández.
En un acto desde la sede del Ejecutivo para conmemorar los 32 años del inicio de la guerra con el Reino Unido por el archipiélago, Fernández dijo que el mensaje de Argentina no solo tiene que ver con un reclamo de soberanía sino con "un mensaje de paz en un mundo desquiciado por los enfrentamientos".
Según Fernández, Malvinas constituye hoy la mayor base militar existente al sur del paralelo 50 grados sur.
"Desde Malvinas, se maneja todo el despliegue militar británico en el Atlántico sur y también los sistemas de inteligencia electrónica. Las islas se encuentran entre los territorios más militarizados del mundo", aseguró la presidenta en su discurso, transmitido por cadena nacional.
Fernández dijo que el Reino Unido, una "nación que está en todos los frentes donde hay guerras en el mundo y que "casi siempre está del lado agresor", no desglosa en sus presupuestos los gastos de defensa en Malvinas.
Sin embargo, precisó que se calcula que el gasto militar hecho para mantener la base en Malvinas, situada a 13.000 kilómetros de Londres, es de $31.000 anuales por cada ciudadano británico.
"Sería bueno que se dedicarán menos a guerrear y más a ocuparse del propio pueblo inglés, que seguramente se lo agradecía mucho más porque tienen severos problemas de desempleo y severos recortes", reclamó Fernández.
La presidenta dijo estar "segura" de que a muchísimos ciudadanos ingleses no les interesa en nada tener que destinar millones de dólares a sostener una base militar.
Detalló que las fuerzas británicas tienen en las islas un patrullero, un buque de apoyo, un buque de investigación, un submarino nuclear con capacidad de portar armas nucleares, un rompehielos, una fragata, 800 hombres de la Real Fuerza Aérea, 500 efectivos del Ejército, 30 de la Armada real, dos pistas aéreas militares, aviones, helicópteros y misiles.
Además, destacó, hay en las islas aviones de combate "equipados con poderosos misiles crucero capaces de alcanzar gran parte del Cono Sur americano.
"Algunos dicen que esos misiles pueden llegar hasta Ecuador, inclusive", advirtió.
Aseveró que el "inmenso despliegue militar" británico va en contra de la política de desnuclearización que Argentina apoya a nivel internacional.
Insistió en que hay un "doble estándar" por el que muchas potencias critican la anexión rusa de Crimea pero callan sobre la cuestión de las Malvinas, que fueron ocupadas por los británicos desde 1833, diecisiete años después de que Argentina se declarara independiente de España.
"En realidad, lo que domina la política internacional es la relación de fuerzas, no es el derecho internacional ni el derecho a la paz y a la integridad territorial. Es la ley del más fuerte. El que puede pisarle la cabeza al otro, se la pisa y nadie reclama por eso", dijo.
Fernández recordó las resoluciones de Naciones Unidas que instan a la negociación de las partes por la soberanía de las islas, algo a lo que el Reino Unido se niega con el argumento de que son los malvinenses quienes deben decidir sobre dicho asunto.