Montevideo. EFE. Más de 2,6 millones de uruguayos están convocados a las urnas el domingo entrante para elegir a su presidente entre siete candidatos y definir la integración del Parlamento, en unas elecciones con sufragio obligatorio y que casi seguramente tendrán una segunda vuelta presidencial.
Según todas las encuestas, el expresidente Tabaré Vázquez (2005-2010), de la coalición de izquierda Frente Amplio (gobernante ), será el más votado (las encuestas le asignan el 43% de intención de voto), pero no llegará al 50% necesario para ganar la presidencia en la primera ronda.
En segundo lugar se ubica el diputado Luis Lacalle Pou , del Partido Nacional o Blanco (conservador), principal fuerza de la oposición (con un poco mas del 30%), y bastante más abajo (15%) el senador Pedro Bordaberry, del Partido Colorado, tradicionalmente gobernante en Uruguay, pero ahora segunda fuerza de la oposición.
Pablo Mieres es el candidato del Partido Independiente, el cuarto con representación parlamentaria, aunque la intención de voto no va mas allá del 3%.
También aspiran a la presidencia, pero con un apoyo de apenas el 1% Gonzalo Abella candidato de Unidad Popular; César Vega, del Partido Ecologista Radical Intransigente, y Rafael Fernández, del Partido de los Trabajadores.
Todo parece indicar que Vázquez y Lacalle Pou deberán definir el futuro presidente uruguayo en una segunda vuelta fijada para el domingo 30 de noviembre.
Además, los uruguayos concurrirán a 6.948 circuitos de votación de todo el país, para definir la integración del futuro Parlamento, formado por 31 senadores, incluido el vicepresidente de la República, y 99 diputados representantes de los 19 departamentos.
La mayor cantidad de votos se concentran en Montevideo, la capital, con 1.044.505 electores y bastión del Frente Amplio.
La coalición de izquierda, que agrupa una docena de partidos, entre ellos a socialistas, comunistas, marxistas, socialdemócratas, independientes y los extupamaros del presidente José Mujica, tiene en la actualidad la mayoría en el Senado y en la Cámara de Diputados, pero según las encuestas la perderá.
La legislación uruguaya obliga a los partidos políticos a concurrir a las urnas con un solo candidato a la presidencia, definidos hace cuatro meses en elecciones internas, pero permite la presentación ilimitada de listas de aspirantes a senadores y diputados.
Así, los distintos grupos y sectores que respaldan a los diferentes candidatos están presentes en las calles del país con banderas y carteles con los colores y números que identifican sus propuestas.
A ello, se suman las músicas y vídeos elegidas para promocionar cada candidatura, y que se repiten sin cesar en canales de televisión, radios y zonas públicas.
Las elecciones presidencias y legislativas han sido separadas de los comicios departamentales que se celebrarán en mayo del 2015.
Quien resulte vencedor de las elecciones recibirá el mando presidencial el 1.° de marzo del 2015 de manos del actual mandatario José Mujica.
Pepe Mujica, como se le conoce, dejará la Presidencia con altos niveles de popularidad en un país donde la reelección está prohibida por la Constitución.
El mandatario, de 79 años y que arrastra problemas de salud derivados de sus más una década preso en duras condiciones antes y durante la dictadura (1975-1985), aceptó encabezar las listas al Senado de su sector, el Movimiento de Participación Popular (MPP).
Ello, según dijo, porque la probable pérdida de la mayoría parlamentaria hará que la próxima legislatura sea de “mucho diálogo y negociación”, condiciones que le reconocen aun sus opositores.