Lima.
Dos militares y un civil fallecieron este sábado y otros seis soldados quedaron heridos tras un ataque de remanentes de la guerrilla Sendero Luminoso en la selva central de Perú, informó el gobierno, en la víspera de las elecciones presidenciales.
Se trata de dos soldados y del chófer de una patrulla del Ejército peruano que se dirigía a prestar seguridad a locales de votación en la región Junín (centro) para los comicios generales del domingo. El hecho ocurrió en la localidad de Hatun Asha, en el distrito de Santo Domingo de Acobamba.
El presidente Ollanta Humala calificó el atentado como un "acto demencial" en conferencia de prensa este sábado en Palacio de Gobierno. "El terrorismo y quienes se coluden no tienen cabida en nuestra sociedad ni en nuestra familia", dijo el gobernante.
Los heridos ya son atendidos, mientras que una operación militar continúa en la zona.
El Ejercito informó que el material electoral ya había sido entregado en la localidad de destino. "Este ataque no empaña los comicios", dijo por su parte el jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Mariano Cucho.
El 10 de abril, 23 millones de peruanos eligen a su nuevo presidente, 130 congresistas y a sus representantes al Parlamento Andino.
El sector donde ocurrió el ataque se encuentra en la región del temido VRAEM (acrónimo del valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro), una franja de selva entre montañas que une las regiones de Huancayo, Ayacucho, Apurímac y Cusco. Es, además, la mayor cuenca cocalera del mundo y refugio de la guerrilla.
Según las autoridades peruanas, remanentes de Sendero Luminoso se mantienen vigentes debido a una alianza con grupos de narcotraficantes a los que cobrarían cupos para protegerlos durante el traslado de cargamentos de coca. Los enfrentamientos son constantes.
Perú es uno de los principales productores mundiales de hojas de coca y de cocaína, según reportes de agencias de Naciones Unidas y la policía antidrogas de Estados Unidos.
En 2015, el gobierno reforzó la lucha antidrogas y construyó 12 bases militares en la zona del VRAEM. Sendero Luminoso, de origen maoísta, está desarticulado desde mediados de la década de 1990 y sus principales líderes, presos.
No obstante, el presidente reconoció que, si bien los remanentes de Sendero ya no son una amenaza para el Estado, aún tienen capacidad de causar muertes.
"El Perú ya ha vivido estas etapas de violencia y nosotros estamos trabajando para pacificar el país (...) Lo que hacen con estos actos demenciales es unir más a los peruanos", agregó Humala.
Perú vivió un conflicto armado desatado por Sendero Luminoso entre 1980 y 2000 que dejó más de 69.000 muertos y desaparecidos, según concluyó la Comisión de la Verdad y Reconciliación en 2003.