Estambul. AFP. El Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) reivindicó ayer el asesinato de dos policías turcos en represalia por el atentado suicida en la ciudad turca de Suruç , atribuido al grupo yihadista Estado Islámico (EI), lo que elevó la tensión en el país.
“El 22 de julio se llevó a cabo una acción punitiva contra dos policías que cooperaban con la banda de Daesh (acrónimo árabe del EI) en Ceylampinar”, escribió en su página web el brazo armado del PKK, las Fuerzas de Defensa del Pueblo (HPG).
El grupo, calificado como terrorista por Turquía y sus aliados occidentales, describió a los atacantes como un “equipo ‘apoísta’ de autosacrificio”, en referencia al líder encarcelado del PKK Abdulá Ocalan, apodado Apo (tío).
Este miércoles por la mañana, dos policías fueron hallados muertos de un disparo en la cabeza en la misma casa de la ciudad fronteriza de Ceylampinar, según los primeros elementos de la investigación citados por el gobernador de la provincia de Sanliurfa, Izzetin Küçük.
El atentado ocurrido el lunes en Suruç , otra ciudad fronteriza con Siria, dejó al menos 32 muertos y un centenar de heridos.
El ataque iba dirigido contra un grupo de jóvenes activistas de izquierda simpatizantes de la causa kurda que querían atravesar la frontera para participar en la reconstrucción de Kobane, ciudad siria devastada por cuatro meses de intensos combates que se saldaron con la victoria de las milicias kurdas de Siria sobre los combatientes del EI.
La Policía de Turquía identificó este miércoles a un joven turco de 20 años como el autor del atentado suicida del lunes.
“Confirmamos sobre la base de análisis genéticos practicados, que el autor del ataque es un hombre de 20 años originario de Adiyamán”, declaró un responsable turco bajo el anonimato.
Según la prensa local, el joven se había unido a las filas del Estado Islámico hace dos meses.
Amenaza constante. El EI, que ha tomado amplios territorios en Siria e Irak cerca de la frontera turca, no ha reivindicado por el momento el atentado de Suruç.
No obstante, este fue el primer ataque por el que el Gobierno turco acusó al EI en su territorio .
Las autoridades turcas también investigaban si existe alguna conexión entre los hechos de Suruç y un ataque mortal en ciudad de Diyarbakir, en el que murieron cuatro personas en junio.
Estos acontecimientos llegan en un momento crítico en Turquía, después de las elecciones en las que el Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), del presidente Recep Tayip Erdogan, perdió la mayoría parlamentaria por primera vez desde el 2002.
El Partido Popular Democrático (HDP), prokurdo, convocó una gran “manifestación por la paz”, el domingo en Estambul.
El Gobierno turco entabló conversaciones de paz con el PKK , alzado en rebelión contra Ankara desde 1984, en un conflicto que ha dejado 40.000 víctimas.