El Cairo. AP. El Gobierno egipcio anunció ayer una extensión de 24 horas en las conversaciones indirectas entre Israel y la milicia Hamás, con el fin de llegar a un acuerdo a largo plazo que permita la reconstrucción de la franja de Gaza luego de un mes de guerra que dejó más de 2.000 muertos.
El anuncio se hizo cuando venció una tregua temporal, y permitió evitar la reanudación de los combates que provocaron una amplia destrucción en Gaza y trastornaron la vida en el sur de Israel.
“Los palestinos y los israelíes acordaron extender el cese del fuego 24 horas más, con el fin de continuar las actuales negociaciones”, informó el Gobierno de El Cairo en un comunicado oficial. Funcionarios palestinos e israelíes confirmaron su aceptación del pedido egipcio de extender la tregua.
Desde la semana pasada, Egipto sirve de anfitrión a conversaciones indirectas entre Israel y Hamás para poner fin a la guerra.
Según el l funcionario del Ministerio de Salud gazatí Ashraf al-Kidra, la cifra de muertos palestinos había superado los 2.000 , en su mayoría civiles, en tanto la ONU, que se toma más tiempo para verificar los datos, dice que son 1.976.
Miles de viviendas resultaron destruidas y decenas de miles de personas siguen en refugios de la ONU. Israel registra 67 bajas fatales; de estas, tres eran civiles.
Partes no ceden. Egipto se reunió con las partes ayer, pero las brechas parecían seguir siendo amplias . Hamás exige que Israel y Egipto pongan fin a un bloqueo que ya lleva siete años y ha arrasado su economía. Israel quiere garantías de que Hamás, que le disparó miles de cohetes, sea desarmado.
En un aparente esfuerzo por presionar a Hamás, Egipto dijo que será uno de los que convocará una conferencia internacional de recaudación de fondos para Gaza, pero solo si se alcanza un acuerdo.
Por su parte, Israel afirmó que en los últimos meses ha detenido a un centenar de agentes de Hamás en Cisjordania por una presunta intención para derrocar al presidente palestino, Mahmud Abás.
El bloqueo de Gaza, impuesto cuando Hamás tomó control del territorio en el 2007, seguía siendo el obstáculo principal. La medida ha limitado la entrada y salida de personas y bienes del territorio de 1,8 millones de habitantes.
Israel dice que el bloqueo es necesario para impedir el contrabando de armas, pero Hamás alega que se trata de un castigo colectivo.