Washington
Ashton Carter juró su cargo como nuevo secretario de Defensa de los Estados Unidos y se dirigió en una carta a los empleados del Pentágono, a los que prometió "liderazgo y enfoque" para hacer frente a los desafíos de seguridad y presupuesto en Defensa.
Tras tomar posesión en una ceremonia privada en la Casa Blanca con el vicepresidente estadounidense, Joseph Biden, Carter se dirigió a los más de 2 millones de empleados militares y civiles a cargo de su departamento para delinear sus prioridades.
"La primera prioridad es ayudar al presidente a tomar las mejores decisiones de seguridad nacional posibles para proteger a nuestro país", señaló Carter en su misiva.
El nuevo jefe del Pentágono recordó que Estados Unidos sigue enfrentándose a "un mundo peligroso" con el terrorismo alimentándose en la inestabilidad de Medio Oriente y norte de África, la crisis de Afganistán, las tensiones en Asia-Pacífico y Europa, la proliferación armamentística y las amenazas cibernéticas.
El nuevo secretario de Defensa, que sustituye a Chuck Hagel en el puesto, se comprometió a que el personal militar reciba la asistencia necesaria para realizar su trabajo y prometió "la mayor de las reflexiones" al sopesar el envío de tropas a situaciones de combate.
"Me aseguraré que vuestro entrenamiento y equipamiento es tan bueno como nosotros" , aseguró el nuevo secretario de Defensa, que ha pasado tres décadas vinculado al Pentágono y fue número dos entre 2011 y 2013, así como jefe de adquisiciones y armamento.
Asimismo, Carter se comprometió a seguir construyendo un ejército fuerte, esquivando los recortes automáticos al presupuesto de Defensa, que se adoptaron en el Congreso por las divisiones entre partidos y que amenazan con fuertes reducciones de gastos.
"Tenemos que asegurarnos de que podemos hacer mejor uso del dinero de los contribuyentes. Eso se traduce en una organización más delgada, menos compleja y en reformar nuestras prácticas de adquisiciones " , destacó Carter.
El nuevo secretario de Defensa, un tecnócrata con formación de físico nuclear, fue confirmado la semana pasada por unanimidad en el Senado, después de que el presidente Barack Obama lo propusiera como sustituto de Hagel, que dimitió en noviembre.