Ciudad de México, México
La Comisión Nacional de Derechos Humanos, un organismo oficial mexicano, criticó a la fiscalía nacional por no atender las recomendaciones que le hizo hace más de un año sobre la investigación de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala, en el sur de México.
Según un documento divulgado el domingo, la Comisión consideró que la respuesta de la Procuraduría General de la República a sus peticiones fue "insuficiente e imprecisa" y que "en muchos casos" la fiscalía "trató de justificar su observancia con la mención de diligencias no vinculadas al planteamiento específico".
LEA: México publica en Internet investigación de los 43 estudiantes desaparecidos
La entidad defensora de los derechos humanos presentó en julio un informe en el que denunció fallos y omisiones de la investigación y en el que cuestionó por primera vez la versión oficial sobre la desaparición de los 43 estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa, "el más grave conjunto de violaciones a los derechos humanos en la memoria reciente del país", dijo entonces.
De las 26 observaciones hechas entonces por la Comisión a la fiscalía mexicana —también había recomendaciones para autoridades locales y estatales— dos "fueron atendidas parcialmente; una fue atendida parcialmente con avance mínimo; tres se encuentran en vías de atención y 20 no fueron atendidas", denunció el organismo.
LEA: Gobierno de México no permitirá que CIDH interrogue a sus soldados por caso Ayotzinapa
Asimismo, consideró que dar respuesta a esas recomendaciones contribuiría a saber qué pasó en Iguala la noche de los ataques a los estudiantes, un requisito "indispensable para materializar el derecho de las víctimas a la verdad, a la justicia y a la reparación integral del daño, aspectos que, a su vez, son necesarios en la aspiración a la no repetición de los actos".
Seis personas murieron y 43 estudiantes de magisterio desaparecieron el 26 de septiembre de 2014.
LEA: Presidente de México ordena crear fiscalía para buscar a desaparecidos
Según la versión oficial, policías municipales de la ciudad de Iguala y del vecino municipio de Cocula secuestraron a los jóvenes por orden del alcalde de Iguala, los entregaron a miembros de un grupo de la delincuencia organizada Guerreros Unidos, y sicarios de esta organización los llevaron a un basurero de Cocula, donde los quemaron y arrojaron sus restos al cercano río San Juan.
Solo se localizó un puñado de huesos calcinados en muy mal estado y solo se pudo identificar plenamente por ADN un fragmento óseo, que sí correspondía a uno de los estudiantes desaparecidos. Después hubo otra identificación pero que no puede darse por certera al 100%.
Entre otros puntos, el informe de julio de la Comisión pedía establecer con claridad si los restos encontrados en el río San Juan y que el gobierno dijo que eran de los estudiantes "son o no de origen humano", cuestionó la recreación de los hechos realizada por la fiscalía e instó a interrogar a 16 personas clave para la investigación que no habían rendido declaración hasta ese momento.
LEA ADEMÁS: Padres de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa se reúnen con Enrique Peña Nieto
Esa fue la primera vez que una entidad oficial exhibía las carencias de una investigación que después, en septiembre, fue cuestionada duramente por un grupo de expertos independientes que tumbaron definitivamente la versión oficial y denunciaron obstrucción a la justicia por parte de algunos funcionarios.