La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) propone eliminar los subsidios que tienen el diésel, el combustible para aviones y el búnker.
Los precios de esos combustibles son subvencionados con un mayor costo de las gasolinas, el gas y el asfalto, entre otros.
El impuesto único de los combustibles no tiene relación con los subsidios.
La Aresep comparó el impacto de los subsidios con los precios internacionales de los combustibles al 25 de setiembre y los precios en plantel al 4 de octubre.
La investigación determinó que Recope subvalora el costo real en plantel de cada litro de diésel en ¢33, mientras el del búnker en ¢26 y el del jet fuel en ¢35,49.
Sin embargo, la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) compensa esa subvaloración con costos más altos para otros productos.
Por ejemplo, el precio en plantel de la gasolina regular es aumentado o sobrevalorado en ¢46, el de la súper en casi ¢83, el del gas en ¢25 y el del asfalto en ¢150.
Según Carolina Mora, vocera de la Aresep, desde la década de los 80 el Gobierno decidió subsidiar el diésel y el búnker para reducir el costo del transporte de personas y de la producción de bienes, y ayudar a las familias.
Eso provocó en los últimos años una alta distorsión entre el precio internacional y el local de productos como el diésel.
La Aresep propone eliminar las distorsiones mediante el ajuste del costo plantel sin afectar las finanzas de Recope.
De esa manera desaparecería totalmente la sobrevaloración y la subvaloración de todos los productos, excepto el de la súper.
Finanzas. El litro de gasolina súper en plantel seguiría sobrevalorado en ¢24 debido a que, al eliminar totalmente esa distorsión y de manera inmediata, se afectarían las finanzas de Recope.
De esa manera, con los precios actuales de los combustibles en las estaciones de servicio, el litro de diésel subiría al consumidor en ¢33, mientras el de gasolina súper bajaría ¢59 y el de regular ¢46.
La Aresep convocó a audiencia pública el 7 de diciembre. Luego los técnicos harían una propuesta que el Regulador aprobará o rechazará.
Maritza Hernández, presidenta de la Cámara Nacional de Transportistas, dijo que si la propuesta de la Aresep es aprobada, subiría el transporte público y se afectaría a los más pobres.
Shirley Saborío, directora ejecutiva de la Unión de Cámaras, afirmó que el costo del transporte de productos aumentará.