El presidente de la República, Óscar Arias, condenó ayer el golpe de Estado en Honduras y lamentó lo que considera un “retroceso” en la madurez política de la región centroamericana.
“Yo espero que se condene sin ninguna contemplación este golpe de Estado. Creímos que la democracia centroamericana se había consolidado lo suficiente como para que esto no volviera a ocurrir”, dijo Arias ayer en conferencia de prensa.
El mandatario respaldó a Zelaya, que llegó ayer al Aeropuerto Internacional Juan Santamaría, traído por militares hondureños en un vuelo del cual ni el propio Arias tenía conocimiento.
“Lamento que haya civiles, líderes políticos y parte de la sociedad civil en nuestros pueblos, que todavía cometan el error de aplaudir un golpe de Estado tan solo porque se discrepa con el gobierno de turno”, recalcó Arias.
“Este golpe de Estado es un retroceso en ese avanzar a la democracia en toda la América Latina”, agregó el Nobel de la Paz.
El presidente costarricense participa hoy, junto con el resto de mandatarios del istmo, del encuentro regional del Sistema de Integración Centroamericana (SICA).
Zelaya llegó en camiseta de dormir, como reconoció el propio presidente depuesto de Honduras. Arias invitó a Zelaya a viajar juntos a Nicaragua a la reunión centroamericana.
En la reunión del SICA, Arias se pronunciará sobre la legitimidad del gobierno hondureño.