Cada vez que un diputado se ausenta sin permiso del plenario, o de las comisiones, deja de percibir ¢31.000 por concepto de dieta.
Sin embargo, la costumbre que ha imperado es solicitar una autorización (para ganarse la dieta) al presidente legislativo de turno. El permiso al jerarca debe ir con el visto bueno del jefe de fracción.
Por reglamento, el jerarca del Congreso puede firmar hasta 10 permisos diarios.
Los legisladores reciben mensualmente ¢1.730.054 de salario distribuido de la siguiente manera: ¢451.514 por gastos de representación y ¢1.278.540 por dietas.
Antonio Ayales, director ejecutivo de la Asamblea Legislativa, explicó que el rebajo salarial se hace del monto asignado a dietas.
La fórmula. El funcionario explicó que la reducción salarial por ausentarse sin permiso se aplica así: el monto por concepto de dietas se divide entre el número estimado de sesiones a las que asiste un legislador (en promedio, unas 40 por mes). De ahí se calcula el valor promedio de una dieta.
Por ejemplo, si un legislador se ausenta sin justificación de 10 sesiones se le rebajarán unos ¢310.000 del salario.
Los diputados deben asistir a las sesiones del plenario, de las comisiones permanentes y especiales, de las comisiones plenas, así como a las reuniones de la fracción.
La forma como se calculan los ingresos de los legisladores por su labor en el Congreso rige desde diciembre de 1998, cuando se aprobó la Ley de remuneración de los diputados , en la cual se establece un incremento anual del 10% sobre el sueldo bruto vigente.
El porcentaje del alza que reciben los diputados se distribuye así: un aumento del 5% se aplica en mayo y el otro en noviembre.