Una empresa presidida por el dueño de Grupo Mapache, Carlos Arroyo Quirós, cobra $800 por cada paja de agua en Playas del Coco y solo quienes paguen un adelanto tienen acceso a una carta de disponibilidad de agua por parte del AyA.
Ante la escasez de agua en la zona, la compañía Cocowater S. A., domiciliada en Grupo Mapache, en Playas del Coco, propuso a Acueductos y Alcantarillados (AyA) construir un acueducto y donarlo a la institución.
Como presidente de Cocowater, Arroyo firmó una carta de entendimiento con el subgerente de AyA, Olman Chacón Garita, el 16 de marzo del año pasado.
En el documento, Cocowater se comprometió a asumir los costos de la construcción de la ampliación del acueducto de Playas del Coco, Guanacaste. El monto no se especifica.
A cambio, Acueductos garantizó el otorgamiento de 5.000 servicios de agua a Cocowater.
Un año después de firmada la carta, Cocowater no ha iniciado la construcción del acueducto, según corroboró este diario en un recorrido por la zona. La empresa, que ha recaudado $1,7 millones por concepto de pajas, asegura que ya instaló dos tuberías en El Coco.
La única inversión visible del acueducto son siete pozos que el AyA construyó con recursos propios en terrenos de Grupo Mapache y de otros desarrolladores privados en Sardinal y El Coco. Los pozos están totalmente construidos, pero los terrenos aún no han sido traspasados al AyA, como se acordó inicialmente.
Arroyo, presidente de Cocowater, explicó que el proyecto pasó de un diseño para 4.000 pajas a 10.000 por la gran demanda que existe. Por eso, dice, han tenido que cambiar el diseño y modificar la infraestructura.
Actualmente, los interesados en adquirir pajas depositan un adelanto en una cuenta de Cocowater porque todavía no se ha constituido un fideicomiso que las partes acordaron conformar.
En el proyecto participan 32 desarrolladores, pero solo ocho, entre ellos Mapache, pretenden concentrar 5.752 pajas (un 86,81%)
Cartas de oro. Arroyo explicó que los interesados depositan un 25% del costo total por paja ($200) si solo quieren reservarla y un 50% ($400) si desean obtener la carta de disponibilidad de agua del AyA.
El director regional de Acueductos en Guanacaste, Carlos Guillermo Leiva, giró instrucciones para entregar cartas de disponibilidad condicionadas solo a quienes presentaran una certificación de cancelación de Cocowater, según consta en los expedientes.
La carta de disponibilidad de agua tiene un gran valor para los desarrolladores, pues es un requisito indispensable para solicitar los permisos de construcción ante la municipalidad.
Un acuerdo de Junta Directiva del AyA del 2001, prohíbe que se entreguen cartas de disponibilidad de agua a “hasta tanto no se construya la infraestructura global necesaria y se cuente con fuentes de abastecimiento real para los habitantes de eventuales nuevos desarrollos”.
Incluso la carta de entendimiento firmada por Arroyo y Chacón establece que ese documento “no implica el otorgamiento de la carta de disponibilidad de agua ni la autorización para el inicio de ninguna obra, ya que estas se otorgarán hasta tanto se cumpla con todos los requisitos y aprobaciones regulares”.
El Subgerente del AyA asegura que la institución entrega cartas de disponibilidad a los ciudadanos que construyan una casa, pero no a los desarrolladores de proyectos porque no hay disponibilidad de agua en la zona.
Chacón admitió que se estuvieron entregando cartas de disponibilidad a los depositantes de Cocowater, pero sostiene que se suspendió el procedimiento hasta que se suscriba el fideicomiso.
El funcionario asegura que no hay ninguna irregularidad en la entrega de las cartas porque éstas se entregaron “condicionadas” a que el proyecto se realizara y a que cumpliera con los requisitos.
Consultado sobre si esas cartas tuvieron valor legal en la municipalidad para recibir permisos de construcción, el funcionario respondió: “Me imagino que sí”.
Chacón aseguró que Cocowater ha recaudado $5 millones, pero Arroyo indicó que sólo han ingresado $1,7 millones.
“Probablemente hay un mal entendido, cuando paguemos todos, tendremos $5 millones. El proyecto se estima que costará $ 8 millones para 10.000 pajas. Hay suscritas casi 6.000 pajas de agua, que a $800 por paja serán $4,8 millones, pero aún no están pagadas”.
Solo Arroyo y su abogada Marianela Vargas están autorizados a firmar en la cuenta de Cocowater. El saldo de la cuenta, dice Arroyo, es de unos $15.000 por las inversiones realizadas.