EscucharLimón. Gensell Mayorga, la joven de 24 años embarazada que falleció víctima del virus de la influenza AH1N1 fue, al menos, doce veces al Hospital Tony Facio de Limón para que le atendieran los síntomas de una gripe fuerte.
“Mi hija tenía siete meses de embarazo, estaba enferma y hasta que la vieron grave y al borde de la muerte la tomaron en serio y la enviaron al Hospital Calderón Guardia”, relató la mamá de la joven, Flor Mayorga.
Con indignación en su rostro y en sus palabras, Flor cuenta las doce veces que fue con su hija al hospital de Limón y la devolvieron sin la atención solicitada.
“Solo le daban acetaminofén o jarabe para la tos. En una ocasión, mi hija iba tan grave que no podía caminar y tuvo que sentarse en una acera frente al hospital porque no soportaba el dolor en la pelvis y la fiebre”, recordó ayer.
Gensell es una de las nueve víctimas mortales de este virus en lo que va del año, pero la única que enfermó estando embarazada.
En una cesárea de emergencia, practicada en el Hospital Calderón Guardia, en San José, adonde fue trasladada con problemas pulmonares, los médicos lograron salvar al niño que llevaba en su vientre.
La joven fue trasladada en ambulancia a San José. A su madre no le permitieron ir con ella. Flor se tuvo que ir en bus junto con la hija mayor de Gensell. Al llegar, le dieron la mala noticia.
Según Flor, su nieto aún está en ese hospital porque nació de manera prematura.
José Delgado, vendedor en las afueras del Hospital de Limón, es testigo de las horas de espera de la víctima. “Ella estuvo hasta seis horas esperando. Otro día vino casi a rastras y no podía caminar; le pusimos unos cartones en la acera para que descansara un poco”, dijo Delgado.
Flor se enfoca ahora en superar la muerte de su hija y ganar la patria potestad de su nieta mayor –hija de Gensell–, quien está en manos del Patronato Nacional de la Infancia (PANI).
Madre Soltera. Gensell Mayorga era madre de una niña de dos años y trabajaba de cocinera en Pueblo Nuevo, Limón.
Arlen Alfaro, una de sus amigas, contó que iban juntas a clases nocturnas, tres veces a la semana: “Estaba en quinto año de colegio y quería terminar este año para darles un mejor futuro a sus hijos”.
Luis Carlos Vega, subdirector del Hospital Tony Facio, aseguró que no pueden dar detalles porque el caso está en investigación.
“Hay una denuncia de la Comisión de Mortalidad Materno-Infantil del Hospital Calderón Guardia y está en proceso”, dijo.
No obstante, el médico indicó que la paciente nunca estuvo internada en el Hospital de Limón.
Con respecto a la cantidad de veces que la mujer asistió al hospital, no pudo precisar el dato.
“Es una muerte lamentable porque era una mujer joven, madre de dos niños y la familia está en su derecho de hacer lo que crea necesario”, concluyó Vega.
