Servicio del H. México
“Los incentivos no son suficientes para salir al mercado a montar un negocio o algo. Por eso los que salen son aquellos que ya no tienen salario y aprovechan para pagar algunas deudas, pero al final del camino terminan mal; o las personas que están cerca de pensionarse
Fabio Chaves
Presidente del FIT
Los empleados del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) se resisten a irse mediante los planes de movilidad laboral voluntaria promovidos por la entidad.
Tres convocatorias abiertas entre agosto del año anterior y este mes, apenas han atraído a 572 interesados de los 14.000 empleados que integran la planilla fija.
El último de estos procesos se abrió entre el 10 y el 21 de este mes y fue dirigido a todo el personal con nombramiento indefinido y con más de cinco años de antigüedad.
La convocatoria atrajo a solo 224 trabajadores, pese a que en esta ocasión el Instituto mejoró el incentivo al aumentar el bono a cinco salarios, más las prestaciones de ley. En los procesos anteriores se entregaban cuatro sueldos.
De acuerdo con Roberto Chacón, director de la División Capital Humano del ICE, si todas las solicitudes se aprobaran, la entidad obtendría un ahorro de unos ¢3.800 millones anuales en su planilla.
No obstante, este proceso aún debe superar el estudio, caso por caso, por parte de la “administración superior” para su aprobación.
A quienes se les apruebe, dejarán la institución el 1.° de agosto.
Chacón informó de que este proceso forma parte de las medidas de optimización del gasto y control presupuestario en la empresa.
El Instituto lanzó una ofensiva para recortar gastos y optimizar recursos desde que en el 2011 cerró con pérdidas de ¢22.000 millones.
El año anterior aplicó un recorte de ¢80.000 millones y logró cerrar sin números rojos.
El primer programa de movilidad se convocó entre el 21 de agosto y el 21 de setiembre anteriores. En esa ocasión se aprobaron 210 solicitudes de las 239 recibidas.
Un segundo proceso se dio del 15 al 30 de noviembre del 2012, dándose la fecha de efectividad del retiro a partir del 1.° de febrero del 2013. Se acogieron 109 trabajadores
Liquidar personal implica una fuerte erogación. Por ejemplo, a los 210 servidores que se fueron a finales del año anterior se les pagó ¢6.000 millones en prestaciones. Sin embargo, los beneficios se ven una vez transcurridos dos años.
Poco atractivo. Para Fabio Chaves, presidente del Frente Interno de Trabajadores del ICE (FIT), la escasa respuesta de los trabajadores al retiro voluntario se explica por la difícil situación laboral del país. “No hay alternativas de empleo en el mercado y tampoco posibilidades para desarrollarse como emprendedor”, manifestó.
Además, porque los incentivos no son atractivos. Por tal razón, la mayoría de los empleados que optan por esta alternativa están próximos a pensionarse y aprovechan para llevarse “alguito más”.
Chaves dijo que el FIT alertó a los trabajadores para que lo pensaran 10 veces antes de acogerse a estos procesos pues ya tuvieron una experiencia en la administración Figueres (1994-1998). “En esa ocasión la mayoría que se acogió a la movilidad voluntaria dos o tres años después andaban viendo a ver cómo volvían a entrar a empresas públicas”, afirmó Chaves.