Con el propósito de contrarrestar las marchas en favor de los derechos de los homosexuales, grupos evangélicos organizan una manifestación para el 10 de agosto.
De esta manera, estas congregaciones pretenden responder a lo que consideran un ataque a la familia, realizado, según ellos, mediante proyectos de ley para regular las uniones de hecho, el aborto, la fertilización in vitro y la pastilla del día después.
Tales iniciativas, según los organizadores, constituyen un “combo de la muerte”.
La marcha “por los derechos de la familia y la paz” está prevista para las 9 a.m. Saldrá del parque de la Merced y concluirá en la plaza de la Democracia, en San José.
“Es una marcha pacífica con música y oración para el país”, expresó Juan de Dios Calderón, coordinador general y presidente de la Red de Evangelistas y Profetas.
Calderón hizo un llamado a cristianos evangélicos y católicos que estén a favor de la familia “conforme al diseño de Dios”, para que vayan a la actividad.
Expectativas. Según él, durante el encuentro van a recoger firmas para enviar una declaratoria en favor de la familia a la presidenta, Laura Chinchilla, y al presidente de la Asamblea Legislativa, Luis Fernando Mendoza.
Justo Orozco, diputado del partido Renovación Costarricense, no es organizador de la marcha, sin embargo, la promueve.
El diputado expresó que quieren contrarrestar esas “marchitas del grupo Diversidad”.
“Queremos que la vida siga. La actividad es a favor de la familia tradicional de papá, mamá, hermanos y abuelos. Es en contra de las uniones de hecho y todo lo que vaya en contra de lo que dice la Biblia.
”Queremos demostrar que somos más lo que no queremos ir en contra de la Constitución, de familia y la palabra de Dios. Somos un país democrático y sin discriminación; sino que la mayoría manda”, añadió el legislador.
El legislador espera la participación de 30.000 personas, lo que considera “un ensayo” para la marcha multitudinaria que piensa realizar para noviembre.