El Gobierno salió al paso de denuncias de partidos opositores y reveló ayer que trabaja en la elaboración de un proyecto de ley para prohibir en el país “todo tipo de fabricación de armas”.
El ministro de la Presidencia, Rodrigo Arias, anunció que probablemente la próxima semana lleven a la Asamblea Legislativa un plan en que trabajan funcionarios del Ministerio de Justicia.
“Será lo más extensivo posible, pero es un tema difícil de precisar, porque puede que un chip de computadora se use para un dispositivo (de armas)”, advirtió Arias tras el Consejo de Gobierno.
Arias reveló el plan días después de que diputados de oposición denunciaran que el fabricante estadounidense Raytheon instalaría una planta en el país, y que ya hay trámites legales adelantados.
En seguimiento a la denuncia del diputado Óscar López (PASE), la fracción del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) presentó ayer otro plan con un fin igual al que anunció ayer Rodrigo Arias.
“El proyecto surge motivado por el decreto presidencial del pasado 23 de agosto, en el que se emite el ‘Reglamento general para el ordenamiento de permisos’”, dice un comunicado del PUSC.
Rodrigo Arias y el canciller, Bruno Stagno, aprovecharon el tema de las armas para rechazar la “militarización” que atribuyó a Costa Rica el diario Granma, órgano oficial del Gobierno de Cuba.
Señalaron que tal señalamiento solo pretende dañar la imagen internacional del país, en alianza con “sectores internos que han llamado aquí a la rebelión”.
Stagno aludió a la Asociación Nacional de Empleados Públicos (ANEP), que el lunes emitió un comunicado en el que señalaba que la rebelión gana cada vez más legitimidad en el país.
El Canciller lamentó que haya grupos que hagan eco de “acusaciones inaceptables y a todas luces mentirosas”.