Atrapados en la congestión vehicular. Así es como pierden los habitantes de la Gran Área Metropolitana (GAM) 15 días al año, inmersos en el desorden que impide el tránsito libre de la casa al centro de estudios o trabajo, y viceversa.
El dato fue brindado por el ministro de Vivienda, Guido Alberto Monge, al oficializar ayer la puesta en marcha del Plan GAM 2013, con la meta de ordenar 31 cantones urbanos en los próximos 20 años.
“Es necesario desarrollar ciudades más competitivas. Una encuesta de CID-Gallup, de agosto del 2013, dice que perdemos 15 días al año en las presas a raíz de nuestro modelo urbano”, destacó Monge.
Un 75% del consumo energético de Costa Rica proviene de la GAM y la mitad de la población del país habita en esta área, pero por más de 30 años no hubo un plan de ordenamiento de este territorio.
Densidad. El Plan GAM propone crear ciudades más densas, con soluciones de vivienda en vertical y tiempos de viaje reducidos.
Sin embargo, para que la propuesta pase del papel a los hechos, será necesario que los 31 municipios que integran la GAM ejecuten planes reguladores.
“Es necesario el compromiso de las municipalidades para poner en marcha el plan, que es un instrumento de gobernanza urbana”, manifestó el ministro.
De acuerdo con el director de la Unión Nacional de Gobiernos Locales (UNGL), Leonardo Campos, solo seis de esos municipios han completado las etapas del plan regulador para su aprobación.
“Para ejecutar el Plan GAM lo ideal es que los cantones que tienen su plan regulador aprobado lo revisen y lo actualicen, pero aquellos que no lo tienen, que lo formulen según su realidad”, dijo Campos.
La GAM es 3,84% del territorio nacional. A la fecha, un 50% de la población (2,1 millones) vive en ella y se espera que para el 2030, aumente a 3,9 millones de habitantes.
“La oficialización del Plan GAM cumple el compromiso de la administración de contribuir al grave problema del ordenamiento territorial”, resaltó por su parte la presidenta Laura Chinchilla.
El Plan GAM 2013 surge luego de varios intentos fallidos que, por 32 años, impidieron contar con una guía de planificación urbana.