Siete de cada 10 costarricenses no le tienen miedo a la muerte, según reveló una encuesta.
Incluso, cuatro de cada 10 asegura tener listo un plan de financiamiento con alguna funeraria, y seis de cada 10 tiene un nicho familiar en el cementerio.
Para cuando mueran, a seis de cada 10 les gustaría ser sepultados, tres de cada 10 preferirían ser cremados, y a uno de cada 10 le da lo mismo lo que ocurra con su cuerpo una vez fallecido.
Entre quienes esperan ser sepultados, un pequeño porcentaje (10%) indicó que le gustaría llevarse a la tumba algunos objetos, principalmente fotografías y rosarios, pero también hay quienes quieren un celular.
Quienes prefieren la cremación desean principalmente que sus cenizas se tiren al mar o se mantengan en la casa.