Hojancha, Guanacaste. Sesenta familias de las comunidades de Ondores, Matambuguito y Matambú decidieron cambiar sus ranchos por casas de concreto, al aceptar las normas del Banhvi y el Ministerio de la Vivienda.
Los núcleos familiares recibieron un bono para construir.
Matambú es un poblado guanacasteco que se encuentra bajo los regímenes de reserva indígena y asentamiento campesino.
La entrega de los bonos se realizó la semana pasada en el palenque comunal del territorio aborigen. Cada beneficiario recibió un monto de ¢3,5 millones.
Estas familias residen actualmente en ranchos de bambú , los cuales están en condiciones de insalubridad y hacinamiento.
Para Natividad Hernández, vecina de la reserva indígena, esta es una oportunidad para tener una vida con mejor estado de salud.
“Tener una buena casa es lo que sueña uno siempre; ahora puedo estar tranquila porque pronto ya voy a tener mi techo”, aseguró.
Resaltó que dentro de poco habitará en un lugar “donde sé que ya no me voy a mojar, puedo estar en una casa de piso de cemento”.
Apoyo. En el territorio indígena de Matambú viven en total 175 familias descendientes de la cultura Chorotega, en un área que comprende unas 1.500 hectáreas de los cantones de Hojancha y Nicoya.
El ministro de Vivienda, Fernando Zumbado, afirmó que el objetivo es dotar de casa digna a estas familias que han contribuido con nuestra historia.
“Queremos que puedan vivir en lugares donde se sientan felices y que tengan la posibilidad de seguir sembrando productos agrícolas. Que tengan opciones de criar animales de corral”, agregó el jerarca de Vivienda.
A diferencia de otros proyectos habitaciones, estas comunidades indígenas no construirán sus viviendas una al lado de la otra. Para el levantamiento de cada edificación se tomarán en cuenta las costumbres y cultura de los pobladores.
Uno de los atractivos comunales es un palenque indígena, principal centro cultural, donde se ofrecen artesanías locales.