
El sacerdote alajuelense Enrique Delgado enfrentará un juicio por nueve delitos de abuso sexual contra menores de edad.
Lo resolvió ayer el Juzgado Penal de Alajuela, que acogió la petición presentada el 12 de febrero por la Fiscalía.
El lunes se realizó una audiencia preliminar para conocer las pruebas y estudiar la posibilidad de un proceso diferente al juicio.
Delgado no acudió a esta diligencia, porque –según expresó ayer su abogado, Rafael Gairaud– “no hay nada qué conciliar”.
Al cura le atribuyen abusos en perjuicio de tres jóvenes de 15 y 16 años, quienes colaboraban con Delgado en sus labores sociales. Supuestamente, los hechos denunciados ocurrieron en el 2002.
“El padre (Delgado) está tranquilo en la medida de la situación. Está tranquilo y confiado en su inocencia, aunque es difícil que le digan que tiene que ir a juicio”, explicó ayer Gairaud.
El sacerdote, dijo el defensor, se mantiene activo en sus obras sociales, pero no oficia misas.
Al parecer, se encuentra en una casa ubicada en Carrillos de Poás, Alajuela, y difícilmente localizable para la prensa.
Se intentó conocer el criterio del obispo de Alajuela, José Rafael Barquero, pero se informó de que se encuentra de vacaciones y regresa hoy por la tarde.
Prueba
El representante legal del cura insistió ayer en que no existen pruebas sobre la culpabilidad de su representado y así lo sostienen los testigos del caso.
“El fundamento de la Fiscalía es no creerle a los testigos porque dicen que son complacientes con el sacerdote”, expresó.
Además, agregó, las supuestas víctimas no presentan ninguna secuela del abuso.
Todos estos hechos serán dilucidados durante el juicio que podría llevarse a cabo dentro de varios meses, dependiendo de la agenda del Tribunal de Alajuela.
El anuncio del juicio se da a pocos días de que el Tribunal de Cartago condenó a otro religioso por abusos en perjuicios de un monaguillo, de 11 años.
Se trató del cura Orlando Robles García, quien, de quedar firme la pena, deberá permanecer 12 años en prisión.
Robles será el primer sacerdote del país que será juzgado por las reglas del Derecho Canónico.
Asimismo, el 25 de febrero, el sacerdote Francisco Calvo Bolaños se puso a disposición del Tribunal de Juicio de San Carlos, para descontar cuatro años de cárcel por abusos sexuales contra un niño.
Está pendiente el caso de otro cura de Alajuela, de apellido Sandoval, quien es investigado por relaciones sexuales con persona menor de edad.