Eduardo Castillo, encargado de de prensa de la Municipalidad de Cartago y miembro de la comisión pro restauración, dijo que la iniciativa consiste en visitar empresas e instituciones y motivar a sus empleados para que donen una hora mensual de trabajo a las obras.
Agregó que extenderán la campaña a todo el país, solicitando el aporte de esos 60 minutos y la compra de bonos para recaudar fondos, pues el valor de la obra es de ¢400 millones y el Ministerio de Cultura solo tiene ¢130 millones.
“De ahí la necesidad de buscar más recursos para no suspender labores”, añadió Castillo.
La parroquia de Santiago Apóstol se empezó a construir en 1898 en el mismo lugar donde los colonizadores españoles edificaron el primer templo católico de Costa Rica, en 1575, para honrar a su santo patrono.
Cuando estaba en construcción, la parroquia afrontó el embate del terremoto que sacudió a Cartago el 4 de mayo de 1910. Las obras nunca se reanudaron.
Ante el acelerado deterioro de las Ruinas, el Ministerio de Cultura recomendó reconstruirlas pues un sismo de mediana intensidad podría traerse abajo lo que queda.