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Golfito, Puntarenas. Los vecinos de la localidad de Kilómetro 5 luchan por evitar la demolición de sus viviendas que, según una resolución de la Contraloría General, se encuentran en la zona marítimo-terrestre.
Los lugareños aducen que su comunidad pertenece al área urbana de Golfito y este es el argumento con el cual lucharán para conservar sus propiedades.
Ante este nuevo panorama, la Contraloría General solicitó al Instituto Geográfico Nacional (IGN) que determine claramente, si el poblado de Kilómetro 5 está dentro de los linderos de la costa o, como aseguran sus pobladores, pertenecen a la ciudad de Golfito.
Esa posición la comunicó el 14 de junio la entidad fiscalizadora en una carta que envió a la alcaldesa de este cantón del Pacífico sur.
En ella se informa sobre la existencia de un documento del IGN, emitido en 1980, según el cual el sector costero de Kilómetro 5 se ubica dentro de los límites de la ciudad de Golfito. Por lo tanto -y si se confirma que así es-, está fuera de los alcances y disposiciones de la Ley de la zona marítimo-terrestre .
Entre tanto, la incertidumbre mantiene a los pobladores en una angustia constante.
Igualmente angustiados se manifestaron los regidores Carlos Castillo Zapata y Erick Reyes Alvarado, ya que el ayuntamiento no tiene los recursos para efectuar una demolición.
Añadieron que el gobierno local también se encuentra estudiando el tema de los límites.
Temores. Los vecinos alegan que Kilómetro 5 se encuentra dentro de la ciudad de Golfito, según la antigua delimitación.
"Estamos estudiando el plan regular urbano que fue aprobado por el Concejo en el año 1992, así como La Gaceta número 237, publicada el 10 de diciembre de 1992, y la ley de creación de Golfito, en 1949, en que se establecen los límites de este cantón", explicó Reyes Alvarado.
Carlos Castillo insistió que en la actualidad el ayuntamiento no cuenta con presupuesto ni proyectos de vivienda para la reubicación de ese pueblo.
Por su parte, Dogle Abarca Delgado, secretaria del Comité Pro Desarrollo de Kilómetro 5, declaró que esperan no tener que cumplir con la disposición que emitió la entidad contralora.
"La Contraloría nos dijo que debemos de ponernos a derecho, tanto nosotros como los vecinos de otras comunidades de Puerto Jiménez y playa Zancudo (también en el cantón de Golfito)".
Agregó: "Tenemos que unirnos para que en la Asamblea Legislativa se pruebe la Ley de desafectación , así no nos sacaran de nuestras casas".
En playas como Zancudo, varios empresarios manifestaron su malestar pues aducen que, cuando solicitaron los permisos de construcción, la Municipalidad golfiteña nunca les advirtió del problema.
Un ejemplo es Roy Ventura Roig, un extranjero que después de 24 años de residir en la zona sur, no está dispuesto a perder los $1,5 millones que ha invertido.
