Limón. Un control automatizado y más estricto recibe a los camioneros que ingresan en el cantón Central de Limón, cuando transitan por la estación de pesaje de Búfalo.
Ayer se inauguraron formalmente las dos estaciones de pesaje (en ambos sentidos), por lo que ahora el país cuenta con tres puntos para combatir la evasión de los vehículos pesados.
Gracias al convenio entre el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) y Radiográfica Costarricense (Racsa), desde hace mes y medio se aplican los nuevos sistemas de control con pesas y cámaras en carretera. El objetivo es indicarles a los conductores el peso y la dimensión de su vehículo de carga.
Pedro Castro, ministro de Obras Publicas y Transportes, detalló que “este convenio incluye la operación por cinco años de todo un esquema logístico que procura evitar temas como corrupción”.
Se espera que en los próximos meses la logística y legislación del país permitan enviar por correo electrónico el parte por medio del número de placa. En la actualidad, la multa por exceso de carga es de ¢94.000 mientras que por evasión de pesaje es de ¢47.000, según Conavi.
A las estaciones de Cañas y Búfalo se unirá en un periodo de tres meses los servicios de pesaje de Ochomogo y Esparza en ambos sentidos, los cuales tendrán un costo de ¢8.700 millones.
Si un conductor que circula su vehículo con sobrepeso no ingresa a la estación de pesaje, el sistema permite –con cámara– grabar la placa de forma automática y se efectuará la respectiva multa.
Además, se alertará a los oficiales de Tránsito más cercanos para que intercepten el camión.