María Isabel Mora tiene 13 años de ser profesora interina de Inglés en los liceos de Puriscal y Turrubares, en San José.
Según dice, suele utilizar juegos y música en sus clases pues ha comprobado que estas actividades despiertan el interés de sus estudiantes.
“Invito a personas de habla inglesa para que interactúen con mis alumnos (...). Me complació escuchar a una estudiante decirme que había sido capaz de ayudar a un gringo a comprar café y miel. Su cara de felicidad fue mi recompensa”, relató la docente.
La labor que realizan otros miles de profesores interinos como ella, parece favorecer la baja en el abandono estudiantil y la repitencia.
Este fue uno de los hallazgos del V Informe del Estado de la Educación , sin que se den razones claras para explicar tales resultados.
De acuerdo con el análisis, estos educadores contribuyen a reducir las probabilidades de aumentar la deserción en 1,7 veces. Además, añade que, por cada 1% de incremento en el número de docentes interinos, las probabilidades de repitencia se reducen 1,7 veces.
Para el Ministerio de Educación Pública (MEP), no existe una relación directa entre esas situaciones y considera peligroso hacer generalizaciones.
Se intentó conocer el criterio de Ricardo Molina, nuevo presidente de la Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE), pero no devolvió las llamadas.
El V Informe del Estado de la Educación refiere, además, que los docentes graduados de universidades públicas contribuyen en 1,8 veces a reducir las probabilidades de que los estudiantes dejen las aulas..
“Los centros en los que pocos desertan y en los que sus alumnos menos repiten son aquellos con mayor porcentaje de docentes interinos y graduados de universidades públicas.
”Las secundarias en las que uno de cada cinco estudiantes abandona las aulas y en las que más alumnos repiten sus clases, se caracterizan por ser colegios nocturnos, telesecundarias y los que no tienen buena infraestructura”, señala.
El abandono escolar en secundaria aumentó en el 2015 un 0,6% con respecto al 2014. Esto significa que 2.350 estudiantes no regresaron a los colegios luego del receso de julio.
Apoyo. Isabel Román, coordinadora del estudio, explicó que la satisfacción de los jóvenes con el apoyo docente amortigua la exclusión por encima de las becas y de su situación económica.
Se analizaron los 857 colegios públicos y se clasificaron entre peores y mejores en deserción.
”El resultado amerita ser investigado; si el MEP encuentra mayor análisis, sería importante que lo considerara en las estrategias contra la exclusión”, dijo.
La funcionaria tiene como hipótesis que los interinos hacen un mayor esfuerzo en su trabajo porque aspiran a una plaza.
María Isabel Mora coincide en alguna medida con Román. Para ella, los profesores en propiedad no son malos profesionales, solo que se adaptan al sistema.
El año pasado, el Ministerio de Educación Pública (MEP) indicó que 5.300 docentes interinos serían contratados para el curso que empezará el 9 de febrero.
Criterios del Departamento de Estadística del MEP señalan que los resultados del informe deben leerse con cautela.
“Por ningún motivo implica que la mayor presencia de docentes interinos disminuiría la deserción, sino que, para el año puntual que se analiza, se encontró una asociación ”, consideró.
También María Alexandra Ulate, coordinadora del Programa Yo me apunto , del MEP , ve inconveniente generalizar, aunque admite que la actitud del educador es fundamental.
“Uno de los objetivos del 2016 es trabajar con el docente, porque muchos de los estudiantes dicen que se quedan en las aulas por el apoyo de ellos”, expresó.