Los candidatos a la Presidencia de la República, Luis Guillermo Solís (Partido Acción Ciudadana) y Johnny Araya (Liberación Nacional), emitieron su voto esta mañana a la misma hora, cada uno en su junta respectiva.
Minutos antes de las 11 de la mañana, el candidato Johnny Araya se hizo presente en la escuela Carlos Sanabria, en Pavas, San José, donde fue recibido por gran cantidad de seguidores y medios de prensa.
A la misma hora una situación similar vivió Luis Guillermo Solís pero en la junta 1.762, ubicada en el Liceo de Curridabat.
El calor, el roce y la emoción desbordada hacían intransitable el camino de Solís en los corredores que llevaban al aula de la sección 9-1. A la salida, el propio candidato pidió calma a los camarógrafos, fotógrafos y simpatizantes que lo abrumaban.
"No me maten de amor", decía Solís, escoltado a medias por miembros de seguridad de su campaña y unos acongojados agentes de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS) que por disposición del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), le brindan seguridad.
En una sudorosa pausa, el candidato hizo un llamado a votar, pues afirma que tiene reportes de que "aún hay mucha gente que no ha votado".
“Todavía queda mucha gente sin emitir el voto, así que todo el mundo va a salir a votar. Hoy, cuando se cierren las urnas, debemos tenerlas repletas de votos y de ilusiones”, comentó Solís minutos después de salir del recinto.
“No me preocupa tener o no un millón o medio millón de votos. El punto es que la democracia requiere de alimentación y en este proceso es el voto. Si no votamos, se muere de hambre” agregó.
Por su parte, el candidato verdiblanco Johnny Araya aseguró estar alegre y optimista, al tiempo que aseguró que “podría haber sorpresas debido a que la moneda aún se encuentra al aire”.
En su discurso, Araya ha resaltado que su mensaje, desde que renunció a la campaña, ha sido principalmente el llamado a conformar un gobierno basado en un acuerdo nacional. Sin embargo, apuntó que Luis Guillermo Solís no correspondió a su llamado. Ese llamado al acuerdo es para impulsar la gobernabilidad y las transformaciones del modelo de Estado que tiene actualmente Costa Rica.
Araya contó que la última vez que habló con Solís fue en la misa del 2 de febrero, en la Catedral Metropolitana.
Como si se hubiera puesto de acuerdo con los aspirantes, la presidenta de la República, Laura Chinchilla, votó a esa misma hora en la mesa 500 de la escuela Joaquín García Monge, en Desamparados, San José. Allí, la mandataria hizo un llamado a los costarricenses para ejercer su derecho al voto y ser partícipes de estas elecciones.
Antes de ingresar al centro educativo, Chinchilla se detuvo a saludar en el toldo de voluntarios de Liberación Nacional, liderado por la diputada de esa misma agrupación Annie Saborío. Luego, siguió su camino hacia la carpa del PAC donde saludó de igual manera a los simpatizantes de Luis Guillermo Solís.
Los tumultos de personas que querían saludarla y tomarse fotos con ella, así como la prensa dificultaron su paso hacia la junta.
Antes de depositar la papeleta la mandataria hizo un llamado contra el abstencionismo: “No hay escusa para que los costarricenses no acudan a las urnas electorales. Hoy nos dan ejemplo un montón de voluntarios de partidos políticos niños scout, niños de escuelas, profesores y adultos mayores. No existe escusa para salir a votar”. Colaboraron Gloriana Corrales, Esteban Mata y Aarón Sequeira.
Nota actualizada a las 12:15.